tag:blogger.com,1999:blog-14204462774219725182024-03-13T10:07:18.815+01:00El Blog de Juan Antonio S.A.El Blog de Juan Antonio S.A.Juan Ant.http://www.blogger.com/profile/03073460607928765831noreply@blogger.comBlogger46125tag:blogger.com,1999:blog-1420446277421972518.post-68898330260661849172017-01-15T10:44:00.000+01:002017-01-15T10:44:01.810+01:00Escape RoomA medida que el ser humano occidental de clase media se acerca a los cuarenta, comienza a sentir la necesidad de redefinir sus cada vez más escasos momentos de ocio. El habitual esquema de esparcimiento se repite sin solución de continuidad en forma de una ingesta continuada de cervezas y cubatas -desde el clásico cubalibre de Bacardi con el que debutábamos hasta el moderno Gintonic con fresas, clavo y azafrán-, una conversación más o menos interesante y unos desafinados cánticos ante cualquier canción que nos hiciera recordar lo jóvenes que pudimos llegar a ser.<br />
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Ahora, insisto, ante la inminente alborada de los cuarenta, nos planteamos un giro en nuestras derivas, una exploración de nuevos horizontes que equipare la satisfacción que un cubata era capaz de proporcionarnos cuando todavía medíamos nuestro presupuesto en duros.<br />
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Entregados a un concienzudo trabajo de investigación, mi buen amigo Pablo (también conocido como <i>Pablete</i>) y yo emergimos con una serie de propuestas para analizar: paintball, rafting, puenting, billar, submarinismo, senderismo, club de fumadores de opio, club de la lucha, abrir un bar, consumir droga, vender droga, consumir más droga, morir. Todas las alternativas eran válidas, pero necesitábamos encontrar una actividad que pudiera ser del agrado de todo el G8 (apelativo que recibe nuestro grupo de amigos, en semejanza a los grupos de potencias políticas por lo trascendente de nuestras reuniones, de las que emanan importantes decisiones que cambian el curso de la historia como por ejemplo "tapeo elaborado o restaurante de señores", "Almería o Granada", entre otras). Y en esas estábamos, cuando irrumpió ante nosotros una actividad que prometía horas de diversión intelectual: <b>Escape Room</b>. Horas de entretenimiento en forma de rompecabezas a resolver por un grupo de amigos que necesitan aplicar su ingenio para salir de una habitación. Apenas conocíamos los pormenores del Escape Room. Únicamente las referencias que un amigo nos había dado. "Está chulo". Poca información, como veis. Pero allá que nos lanzamos.<br />
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Convocamos al grupo para el viernes siguiente, por la tarde. Concluida la semana laboral para todos nosotros, un G8 ligeramente mermado a G6 (lamentábamos las ausencias de JuanFran y <i>Delos</i>), acometía con cierto nerviosismo la trepidante aventura de descubrir algo nuevo. Agustín, Jorge, Juan Antonio (yo), Pablete, PacoGa y Paco Sánchez, componíamos la expedición en riguroso orden alfabético. La excitación monopolizaba nuestro estado de ánimo en clara competencia con la sed, pero supimos postergar las cervezas, el azafrán y las fresas hasta haber completado el juego. El momento requería sobriedad.<br />
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El recinto es algo similar a una bolera en lo que a su recepción respecta: tres sillas, una máquina de refrescos y un gran mostrador semicircular, tras el cual unos empleados ataviados con un polo rojo y cómodos pantalones de aventura nos recibirían con suma amabilidad y nos explicarían las instrucciones. Carlos, un joven muchacho de preceptiva barba recortada y plaquita en el pecho con su nombre, sería nuestro cicerone.<br />
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"Bien, os explico cómo va esto. Tenéis dos horas para completar todo el juego. En total hay cinco habitaciones de las que tendréis que salir, sucesivamente. En cada una de ellas encontraréis las pistas necesarias para poder salir. Podéis estar en cada habitación un máximo de una hora. Pero tened en cuenta que si gastáis todo el tiempo en dos habitaciones, es imposible que hagáis las cinco. <i>[Inciso: en general no me gusta el verbo gastar para referirse al tiempo; aunque tal vez en este contexto tenía sentido]</i>. El precio del juego son veinte euros por persona. Si no conseguís salir de la primera habitación en una hora, se acaba el juego. ¿Lo habéis entendido?".<br />
<br />
"Sí", contestamos al unísono. "¿Hay niveles de dificultad? ¿O esto es igual para todo el mundo?", preguntó Pablete.<br />
"Bien, lo de los niveles", dijo Carlos, que hablaba con un tono de voz, a mi juicio, injustificadamente alto para lo silencioso de aquella recepción. "Hay tres niveles, básico o iniciación, medio y avanzado. Podéis elegir nivel. Si elegís el avanzado, todas las habitaciones serán complicadas. Si no lo habéis hecho nunca, yo quizá os recomendaría empezar por el básico".<br />
"Pero, ¿el avanzado es muy difícil? A ver, tú nos ves a nosotros, ¿no? ¿Crees que seríamos capaces?", insistió Pablete.<br />
"Pablete, ¿y él cómo lo va a saber, por lo feos que somos?", respondían Jorge y Agustín al unísono.<br />
"Yo qué sé, a nosotros se nos ve que somos tíos inteligentes, ¿no?". Pablo adornó esta frase con unas irónicas muecas, evidenciando un moderado retraso mental que estuvo a punto de dar con nuestros huesos en la calle.<br />
"Bien, lo del nivel avanzado. Hay gente que viene por primera vez y hace el avanzado y lo termina. Pero otros no. Eso ya vosotros". Me empezaba a preguntar si Carlos iniciaría todas sus peroratas siempre con un "Bien".<br />
<br />
Organizamos un breve cónclave:<br />
<br />
"Chicos, ¿qué hacemos? Yo haría el avanzado", nos instigaba Pablete.<br />
Paco Sánchez y Pacoga no estaban del todo de acuerdo: "Digo yo, que si hay uno de iniciación será por algo, ¿no?", razonaba el guitarrista aportando coherencia.<br />
"Bah, no seamos <i>cagaos</i>, seguro que nos lo pasamos mejor en el avanzado. ¿Vamos?", apoyé a Pablo.<br />
<br />
Tras unos segundos de vacilación y escasez de palabras, Pablete anunció el veredicto:<br />
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"El avanzado".<br />
"Bien, seguidme por aquí".<br />
<br />
Recorrimos un pasillo. Bajamos una escalera. Otro pasillo. Una puerta que se abre, entramos. Se cierra a nuestras espaldas. Al otro lado de esa puerta, otro pasillo, ligeramente oscuro. "¿Estamos todos?", pregunté. Sí, estábamos. Tras este nuevo pasillo, de apariencia <i>cloáquica</i>, una corta escalera nos condujo a una especie de sótano húmedo al fondo del cual había una puerta roja. "Esa es vuestra puerta". Giro de llaves, clic, se enciende una luz.<br />
<br />
"Bien, esta es la primera sala". Su voz retumbaba en las catacumbas escapísticas. "Todas las instrucciones las encontraréis aquí dentro. No me podéis hacer preguntas. Sólo os diré que cuando creáis saber la solución, tenéis que teclearla en este terminal. Son cuatro dígitos, como un pin de una tarjeta de crédito <i>[Simil innecesario para un grupo de avanzados, pero sigamos]</i>. Sólo tenéis un intento. No podéis estar probando todos los números porque entonces sería muy fácil. ¿Vale? Si en algún momento necesitáis salir, pulsad este botón y os abriré la puerta. No os preocupéis, no tengáis miedo, es sólo un juego, ¿vale? ¿Alguna pregunta?".<br />
"Yo tengo una pregunta, pero como has dicho que no te podíamos hacer preguntas, mejor me la guardo, ¿no?", respondía Agustín entre risillas, con su habitual sagacidad.<br />
"Bien, el tiempo comienza cuando yo cierre. ¡Suerte chicos!".<br />
<br />
La puerta sonó con un fuerte estruendo y dejó tras de sí un eco que nos mantuvo en silencio durante cinco o seis segundos.<br />
<br />
Recobrado el aliento, iniciamos la inspección de la sala. Era cuadrada, aproximadamente cuatro por cuatro metros. Por todo mobiliario, la habitación albergaba una pequeña mesa de escritorio en el centro de la misma. La luz era suministrada por una lámpara que colgaba del techo. Una de esas lámparas con un largo cordel desembocando en una pantalla o tulipa que aísla en su mayor parte una bombilla azul del contacto directo con los ojos. La bombilla caía a escasos cincuenta centímetros de la mesa, permitiendo apreciar con precisión todos sus detalles y recovecos. Era de un color marrón parduzco, de madera vieja, perfectamente integrable en el mobiliario al uso de una casa rural de alquiler turístico. No había sillas. Ni ventanas. Ni otros objetos. Únicamente la mesa y la lámpara, que proporcionaba una tenue luz apenas suficiente para distinguir las dimensiones de la estancia. Al lado de la puerta, se anclaba el terminal que nos daría la libertad.<br />
<br />
Sobre la mesa, un papel, a por él cuál nos precipitamos todos de forma atropellada, invadidos por la ansiedad del momento y con la evidente convicción de encontrar en él las instrucciones. Jorge llegó el primero y, cogiendo el papel con sus manos, lo leyó en voz alta:<br />
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"Merlín".<br />
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"Merlín", repetía Pablete con la mirada perdida y tono reflexivo.<br />
<br />
Eso era todo lo que ponía en el papel: MERLIN. En mayúsculas, en el centro exacto de un folio blanco escrito con letras negras: MERLIN. El tamaño de fuente podía ser el adecuado para redactar una carta, por ejemplo podíamos estar ante una Arial, 8pt, o quizá algo más, pero no era un tamaño apto para títulos o encabezados. Y allí no había nada más.<br />
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"A lo mejor tenemos que hacer magia", sugería Agustín.<br />
<br />
<b>Continuará...</b>Juan Ant.http://www.blogger.com/profile/03073460607928765831noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1420446277421972518.post-52012582082498861072017-01-09T15:03:00.003+01:002017-01-15T08:30:56.358+01:00Lecturas 2016: Objetivo cumplidoInspirado por la recopilación de libros leídos que cada año realiza puntualmente el gran <a href="http://www.lapaginadefinitiva.com/weblogs/articulosglopez/archives/1067">Guillermo López García</a> en su blog, me he animado a elaborar la lista con la que he alcanzado y superado el objetivo de 25 lecturas del cual dejé constancia en <a href="https://www.goodreads.com/challenges/3890-2016-reading-challenge">Goodreads</a> a principio de año.<br />
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Efectuada la segmentación de libros por meses (idea y formato copiados de Guillermo), observo que enero se consolida como mi mes estrella, año tras año. Tal vez sea por aquello de los propósitos de año nuevo, que elaboro tan fielmente como incumplo.<br />
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Por elegir un criterio, he emplazado cada libro en el mes en que lo finalizo. De esta forma, el causante de la sequía en febrero no es Jesús me quiere sino Crimen y Castigo, que me llevó casi todo febrero y parte de marzo.<br />
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Aquí os detallo los libros que me ha tocado sufrir y disfrutar (en proporciones variables) en 2016. Tres de ellos los leí en inglés, tal y como se indica en la línea correspondiente:<br />
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<b>Enero</b><br />
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1. El secreto de la modelo extraviada, de Eduardo Mendoza<br />
2. Etica para Amador, de Fernando Savater<br />
3. Ficciones, de Jorge Luis Borges<br />
4. Fahrenheit 451, de Ray Bradbury<br />
5. Encuentro con los Otros, de Ryszard Kapuscinski<br />
<b><br /></b>
<b>Febrero</b><br />
<br />
6. Jesús me quiere, de David Safier<br />
<b><br /></b>
<b>Marzo</b><br />
<br />
7. Crimen y Castigo, de Fjodor Dostojevski<br />
8. El curioso incidente del perro a medianoche, de Mark Haddon<br />
<b><br /></b>
<b>Abril</b><br />
<br />
9. Matar a un ruiseñor, de Harper Lee<br />
10. A Field Guide to Getting Lost, de Rebecca Solnit (en inglés)<br />
<b><br /></b>
<b>Mayo</b><br />
<br />
11. La Sombra del Viento, de Carlos Ruiz Zafón<br />
12. El Viejo y el Mar, de Ernst Hemingway<br />
<br />
<b>Junio</b><br />
<br />
13. El Catolicismo explicado a las ovejas, de Juan Eslava Galan<br />
14. Las Particulas Elementales, de Michel Houellebecq<br />
15. La Perla, de John Steinbeck<br />
<b><br /></b>
<b>Julio</b><br />
<br />
16. A Sangre Fría, de Truman Capote<br />
17. El Principito, de Antoine de Saint-Exupery<br />
18. The Wisdom of Insecurity, de Alan S. Watts (en inglés)<br />
<b><br /></b>
<b>Agosto</b><br />
<br />
19. Soy Pilgrim, de Terry Hayes<br />
<b><br /></b>
<b>Septiembre</b><br />
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20. Senda de Campeones, de Martí Perarnau<br />
21. De Ratones y Hombres, de John Steinbeck<br />
22. Matadero Cinco, de Kurt Vonnegut<br />
<b><br /></b>
<b>Octubre</b><br />
<br />
23. El Juego del Ángel, de Carlos Ruiz Zafón<br />
24. The Last Girlfriend on Earth and other love stories, de Simon Rich (en inglés)<br />
25. La Chica del Tren, de Paula Hawkins<br />
<b><br /></b>
<b>Noviembre</b><br />
<br />
26. Historia de España contada para escépticos, de Juan Eslava Galan<br />
<b><br /></b>
<b>Diciembre</b><br />
<br />
27. La Tabla de Flandes, de Arturo Pérez-Reverte<br />
0. El Ruido y la Furia, de William Faulkner (abandonado por infumable)<br />
<br />
Me resultaría demasiado laborioso escribir una reseña de cada uno de ellos, principalmente porque el recuerdo de los detalles se va difuminando. Me limitaré a hacer el difícil (y divertido) ejercicio de seleccionar los tres mejores y los tres peores:<br />
<b><br /></b>
<b>Los tres mejores</b><br />
<br />
7. Crimen y Castigo, de Fjodor Dostojevski<br />
4. Fahrenheit 451, de Ray Bradbury<br />
24. The Last Girlfriend on Earth and other love stories, de Simon Rich (en inglés)<br />
<b><br /></b>
<b>Los tres peores</b><br />
<br />
5. Encuentro con los Otros, de Ryszard Kapuscinski<br />
10. A Field Guide to Getting Lost, de Rebecca Solnit (en inglés)<br />
0. El Ruido y la Furia, de William Faulkner (abandonado por infumable)<br />
<br />
Y este ha sido mi año 2016 en lo que a lecturas se refiere. ¿Qué os parece?<br />
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Iniciamos ahora 2017 con el mismo <a href="https://www.goodreads.com/challenges/5493-2017-reading-challenge">objetivo de 25 libros</a>. ¿Seré capaz de mantener el listón?<br />
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¡Felices lecturas a todos!Juan Ant.http://www.blogger.com/profile/03073460607928765831noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-1420446277421972518.post-57071226249682619762013-09-08T09:56:00.001+02:002013-09-08T10:13:37.166+02:00JJOO 2020: España tendrá que esperarUna vez más, y ya van tres consecutivas, los miembros del COI han decidido que la candidatura de Madrid no es la más adecuada para albergar unos Juegos Olímpicos, decantándose esta vez por la ciudad de Tokio. Y a medida que van pasando las horas tras la comunicación del veredicto, veo cada vez más razones para justificar esta decisión.<br />
<br /><a name='more'></a>
Aunque las muestras de confianza que mostraban nuestros representantes y periodistas hacían suponer que estábamos ante una empresa fácil, la realidad era bien distinta: competíamos contra Estambul, Tokio, contra nuestras carencias y, en mayor o menor medida, contra París, pues la capital francesa presentará una candidatura fuerte en 2024 y nos chocamos con aquella regla no escrita que impide dos celebraciones consecutivas en el mismo continente. Si esto os parece demasiado rebuscado, preguntaos cuántos miembros del COI que apoyen firmemente la candidatura de París (no pocos, a buen seguro), votaron ayer por Madrid.<br />
<br />
Como no podía ser de otra forma, fuimos ilusionados, aunque no sé si tanto como sugerían las encuestas. Nunca me creí el 91% de apoyo que dijo TVE, ni el posterior 95% al que ascendimos a lo largo de la tarde. Se me antoja uno de esos datos extraídos de una encuesta con un censo de población hábilmente elegido: no es lo mismo hacer la encuesta a las puertas de un estadio deportivo tras la celebración de un evento, que realizarla una mañana de martes en un distrito financiero. Al igual que no es lo mismo sondear un barrio obrero que uno acomodado, signifique lo que signifique acomodado.<br />
<br />
En cualquier caso, entiendo la necesidad de mostrar al mundo que el país entero está implicado en el proyecto y siente que su candidatura es solvente y tiene todas las garantías de éxito. Lo contrario estaría condenado al fracaso, desde el minuto cero.<br />
<br />
Pero yo creo que la realidad siempre fue otra: en un país arruinado, en el que hemos sufrido recortes en todos los servicios públicos, desde los más prescindibles hasta los más estructurales (sanidad, educación, justicia), la idoneidad de emprender un proyecto como éste es muy cuestionable.<br />
<br />
Aún así, haciendo el esfuerzo de mirar, por un momento, hacia otro lado, la idea me seducía: ya me veía a mí mismo, junto a mi santa, consumiendo íntegramente las vacaciones del año 2020 en Madrid, con entradas para la mayoría de partidos de baloncesto, tenis, balonmano, con visitas esporádicas al judo, halterofilia, esgrima y con abono completo, faltaría más, para la natación, gimnasia y atletismo. Y claro, es un chasco.<br />
<br />
¿Qué ha pasado? ¿Tan mal lo hicimos ayer? No. En absoluto. La presentación es un paripé. A mi edad ya no me creo que los ponderados miembros del COI, que han dedicado tanto tiempo a visitar las sedes y a razonar y debatir sobre el particular, no acudieran ayer a Buenos Aires con una decisión firme e inquebrantable. Por otra parte, tampoco nos ayudó la exposición de un Mariano Rajoy que evidenció al mundo su incapacidad para hablar inglés y <a href="http://www.lavozdegalicia.es/video/deportes/2013/09/07/juegos-olimpicos-hablo-ingles-ana-botella-ante-miembros-coi/00311378569273051423525.htm" target="_blank">la actuación de Ana Botella</a>, que encarnó fielmente el papel de una sobreactuada niña de ocho años en la función de fin de curso de inglés de tercero de primaria, si es que se imparte inglés en tercero de primaria. Mientras ella hablaba sobre el <i>relaxing</i> café con leche, yo la oía decir "this summer, I will go on vacation with my parents". Pero pelillos a la mar, <a href="http://images.teinteresa.es/deportes/baloncesto/Principe-Felipe-Gasol-Eurobasket-Lituania_TINIMA20110919_0008_5.jpg" target="_blank">nuestra pareja de pívots</a> lo compensó todo.<br />
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Con la cabeza fría, nuestros representantes no aciertan a comprender cómo ha podido suceder. No se lo explican. Pero es muy evidente: para poder creer en esto, hemos tenido que abstraer tanto nuestras lacras que hemos llegado a olvidarlas. Y no son pocas: <b>crisis económica</b> (país arruinado, recortes, gobiernos que mienten una y otra vez a los ciudadanos), <b>corrupción</b> (al margen de si nuestro presidente está finalmente implicado o no, lo que es innegable es que el tesorero del partido que nos gobierna está entre rejas), <b>dopaje</b> (debe ser difícil entender el veredicto de la Operación Puerto fuera de nuestras fronteras, así como otros muchos casos de menor enjundia; que sí, que Nadal y Gasol son limpios y no se dopan, pero hasta el más cruel de los asesinos en serie deja personas vivas). La imagen que transmitimos al exterior, siempre menos dispuesto a hacer condescendencias, nos hace un flaco favor.<br />
<br />
Todas estas circunstancias, están aproximando a España a ese contexto de países subdesarrollados a los que también hay que hacer concesiones, vive Kofi Annan, pero de forma excepcional.<br />
<br />
Así, la nutrida delegación española volvió cabizbaja. Una expedición compuesta por personalidades del mundo del deporte, la política, incluso de la cultura, como la actriz Amaia Salamanca que fue elegida para gritar <i>Gasooooool</i> si salíamos elegidos, emulando a la gran <a href="http://www.youtube.com/watch?v=4dcAxceqSe4" target="_blank">Penélope Cruz en la gala de los Oscars de 1999</a>.<br />
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Otra vez será. Quizá cuando seamos capaces de regalar otro tipo de <a href="http://www.nytimes.com/2012/09/25/world/europe/hunger-on-the-rise-in-spain.html?pagewanted=all" target="_blank">portadas</a> al <a href="http://www.nytimes.com/2013/07/16/world/europe/spain-rajoy.html?ref=spain&_r=0" target="_blank">New York Times</a>.Juan Ant.http://www.blogger.com/profile/03073460607928765831noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-1420446277421972518.post-83798203492011018862011-12-16T13:53:00.001+01:002011-12-16T13:57:59.547+01:00Nuevas experienciasHoy, como cada año, asistiré a la tradicional comida navideña con mis compañeros y amigos del alma. Sin excepción, esta cita se presenta periódicamente en forma de maratón de carcajadas, comida, alcohol y buen rollo. Hoy, por tanto, no iré a la piscina. El miércoles tampoco fui, con el fin de acelerar el proceso de curación de un catarro que ponía en jaque mi presencia en el evento de hoy. Sigo resfriado, pero creo que aguantaré el tirón. <i>Hang in there, baby!</i><br />
<i><br />
</i><br />
<a name='more'></a><br />
Estas ausencias en la piscina, <i>nevertheless</i>, me las puedo permitir con menores cargos de conciencia que un mes ha. Puedo hacer novillos -o, como dirían por la meseta aquellos que implementan con germánica precisión la lingüística española con perlas como el <i>sile </i>y el <i>nole</i>, <i>hacer pellas-</i> un par de días y no pasa nada. Mis logros están intactos, y mi progresión ascendente continúa con vertiginosa proyección.<br />
<br />
Pero no ha sido un camino de rosas.<br />
<br />
El primer día, me presentaba allí con ciertas reservas. Nunca en mi vida había hecho natación, salvo cuando en mi adolescencia ejecutaba con suma torpeza aquellos largos de cuatro o cinco metros en la balsa (*) de mi Tío Pepe (el de El Globo, no confundir con mi Tío Pepe el de la caseta de los caracoles). Aguantaba a flote y movía los brazos imitando a mis primos. Ahora he descubierto que nunca lo hice bien. Lo que yo hacía se parecía menos a nadar que capar seis grillos con unas tenazas.<br />
<br />
Así las cosas, sin haber tenido maestro que me enseñara a nadar antes que a hablar como a tantos otros, he deambulado por la vida durante más de treinta años evitando cualquier actividad que implicara inmersión en más de metro y medio de agua. La pregunta de "¿por qué no vamos a un parque acuático mañana?", siempre fue contestada por mí con un rotundo "¿por qué no te andás a la concha de tu hermana, boludo?".<br />
<br />
Hasta que mis dolencias de espalda (o de rabadilla) han aconsejado que practicara la natación de forma regular, no he dado el paso de aprender a nadar de verdad. Me he visto obligado a superar todos mis miedos, diciéndole al mundo: "sí, aquí me tenéis, tengo treinta y cuatro años y apenas sé nadar".<br />
<br />
Y no me arrepiento.<br />
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Me apunté a la piscina cuando ya había transcurrido un mes y medio desde el inicio del curso. Eso complicaba aún más las cosas, pensé, pues el resto de compis se conocerían ya entre ellos y seguro que ya eran unos aventajados de mierda, que contribuirían a poner mis carencias aún más en evidencia. Pero no fue así. Me encontré con tres señoras con edades <i>ranging </i>entre 45 y 65, que llevaban ya tres años asistiendo al curso de iniciación porque les gustaba. Y punto. Sin prisas de ningún tipo. Las tías nadaban realmente bien. Pero me animaban y me lo hacían todo más fácil.<br />
<br />
El primer gran escollo fue el tema del atuendo. Como <a href="http://mipequenacocinica.blogspot.com/" target="_blank">mi querida Gema</a> es una nadadora de tomo y lomo, que ya se nada la tía ochocientos cincuenta largos en media hora y con un estilo que para sí quisiera la Gemma Mengual esa, pudo prestarme unas gafas viejas rayadas que ya no usa. Porque claro, en natación hay que usar gafas, pero las mías no valen. Y las que me prestó mi querida Gema, como es lógico, no están graduadas. Esto añadió un nuevo ingrediente a la situación: me planto allí, en un sitio que no conozco, a hacer una actividad que no sé hacer -lo cual en cierto modo me avergonzaba reconocer- y encima sin las gafas graduadas que me permiten ver la vida cada día como si estuviera sobrio.<br />
<br />
Rápidamente descubrí que la diferencia principal entre el famoso burro del garaje (**) y yo, es que el burro del garaje no ha tenido que dejar sus gafas en la taquilla. Cuando abren la puerta del garaje y ve la luz, sale echando hostias. Pero yo tenía que encontrar la salida del vestuario sin mis gafas de visión diurna. Cuando estuve a cuarenta centímetros de una puerta con un cartel que decía "ENTRADA PISCINA", supe que mi primer calvario había terminado.<br />
<br />
Y ahí estaba yo, sin ver un capullo y sin saber dónde tenía que ir. Sólo veía gente nadando y andando por fuera de la piscina -no a la vez, obviamente. Tras preguntar a una señora que deambulaba por ahí con peto naranja brillante fosforito -¡Gracias a Dios! ¡Alguien ha pensado en los cegarrutos!-, logré localizar a mi monitor, un muchacho joven que me preguntó qué sabía hacer y me puso a nadar de inmediato.<br />
<br />
Yo empecé a moverme en el agua, avanzando como buenamente podía. Y avanzar, avanzaba, porque no olvidemos que los movimientos básicos siempre supe llevarlos a cabo. Pero iba muy lento, me agobiaba, y tragaba ingentes cantidades de agua por diversos orificios. Mi monitor detectó con suma perspicacia mis limitaciones, y paulatinamente fue añadiendo elementos artificiales a mi anatomía hasta que me convertí en Mister Potato: un cinturón que hacía de flotador, unas aletas, un churro, una tabla. Me sentía Robocop o el hombre orquesta.<br />
<br />
Debí hacer mal todo lo que me iba mandando porque, llegada la recta final de la clase, me encomendó la complicadísima tarea de andar por el agua. ¿Por la superficie?, pensé. No, se refería a andar por el suelo, por donde no cubría. Yo andaba y preguntaba "¿pero así? ¿Andar y ya está?". "Sí, sí, para que cojas soltura", decía mirando rápidamente hacia otro lado. Supongo que era como cuando ves un accidente y no quieres mirar. Mi silueta deslizándose por el agua debía causarle algo parecido a las náuseas.<br />
<br />
Desde aquel día, como os decía al principio, mis progresos han sido magníficos. Mis compañeros -a las tres mujeres iniciales posteriormente se añadió un señor denominado Juan- me dicen que voy mucho mejor que al principio. Ya nado sin prácticamente ninguna ayuda artificial y, aunque cuesta mucho porque me falta tono físico, ya he alcanzado hitos como recorrer toda la piscina de espaldas moviendo sólo las piernas.<br />
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Poco a poco.<br />
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(*) A mí me enseñaron que una piscina es un agujero en el suelo lleno de agua y una balsa es una construcción elevada llena de agua. Como si fuera una piscina del TóisaRás, pero de hormigón, con dos metros de altura y de ancho y largo similares a una piscina, es decir, a gusto del cliente o de la cartera de éste.<br />
(**) Estás más perdido que un burro en un garaje, dice la sabiduría popular.Juan Ant.http://www.blogger.com/profile/03073460607928765831noreply@blogger.com7tag:blogger.com,1999:blog-1420446277421972518.post-7907312775762213122011-05-22T10:26:00.000+02:002011-05-22T10:26:01.183+02:00Yo también estoy indignadoDemostrando una vez más que las redes sociales sirven para algo más que hacer clic en un enlace que reza "Me gusta el bocadillo de Nocilla", los ciudadanos de este país, jóvenes y no tan jóvenes, de izquierdas y de derechas (y también mixtos, indefinidos, etc.), de pelo largo o pelo corto (o ausencia del mismo), del Madrid o del Barça (o del Valencia, Sevilla, Eibar, etc.) han aunado sus fuerzas, saliendo a la calle para protestar contra una situación que consideran perjudicial para sus intereses. Para nuestros intereses. Desde aquí, me uno incondicionalmente a estas "silenciosas" protestas, pues mi descontento con el sistema en el que vivimos, los políticos que nos dirigen, una gran parte de los medios de comunicación que nos informan y el panorama al que estamos abocados, no puede ser mayor.<br />
<br />
<br />
<a name='more'></a>¿Cuántas veces habremos repetido una conversación de estas características? Veamos:<br />
<br />
<br />
- ¡Hay que ver! ¡Qué mal está todo!<br />
- Sí que es verdad, tío/a.<br />
- No hay trabajo, los políticos nos roban, sólo persiguen sus intereses personales...<br />
- Así es. Sólo quieren el poder, perpetuarse, abrazarse a la poltrona y que no se la quiten.<br />
- Claro. Y nos engañan, nos manipulan, nos mienten...<br />
- Esto da asco. Pero, ¿te das cuenta de una cosa? Siempre nos quejamos y nunca hacemos nada.<br />
- Eso es cierto, pero ¿y qué podemos hacer nosotros?<br />
- Pues también llevas razón. ¡Nada! ¡No podemos hacer nada!<br />
<br />
Precisamente lo que más me emociona de estos tiempos convulsos que estamos viviendo tanto en nuestro país como en <a href="http://www.thetechnoant.info/campmap/" target="_blank">cualquier rinconcito del mundo</a> en el que existe un español (incluso en <a href="http://politica.elpais.com/politica/2011/05/21/actualidad/1306004185_469301.html" target="_blank">lo más remoto</a>) es que por fin estamos haciendo algo. Tras escuchar una y otra vez, durante los treinta y tres años y medio que llevo deambulando por este mundo, que nos quejamos y no nos movemos, por fin ha llegado el momento de actuar. Y, a mi juicio, creo que lo estamos haciendo de la mejor forma posible: desde el pacifismo. Levantando la voz, pero no el puño. Alzando pancartas y guardando las armas.<br />
<br />
Ayer, presenciaba la asamblea organizada por los chicos que han asumido responsabilidades en la <a href="http://twitter.com/#%21/acampadamurcia" target="_blank">acampada de Murcia</a> y se me ponían los pelos de punta: ¿cómo ha podido surgir esto de la nada? Con inteligencia y madurez, no me cabe duda. Las personas que están ahí, en esa Plaza Revolución 15 de Mayo (hasta hace una semana conocida como Glorieta de España), han sabido organizar una acampada de cientos de personas (miles en algunos momentos del día), en la que no se bebe alcohol (importante matiz), y en la que han constituido grupos con diferentes responsabilidades, comisiones encargadas de coordinar determinadas tareas y, en definitiva, en la que participan personas dispuestas a aportar a la comunidad su bien más valioso: su cerebro.<br />
<br />
En cuanto termine de escribir esto, me voy de nuevo para allá.<br />
<br />
Por su parte, la actitud de determinados medios de comunicación ante esta coyuntura me produce una mezcla de carcajada y vergüenza. De estupefacción y bochorno. ¿Por qué les da tanto miedo que el pueblo se eche a la calle para protestar pacíficamente?¿Por qué se han esforzado por escupir mierda desde el primer momento? ¿Acaso ven peligrar su aplastante victoria en las urnas? En absoluto: ninguno de ellos teme por el resultado electoral de hoy, ni remotamente. Es su inherente rechazo a todo cuanto altere el orden establecido lo que les irrita. Toda aquella actitud del pueblo que no se limite a escuchar, aceptar y callar es tildada de irreverente, izquierdista e inoportuna. Por eso asocian las protestas a los grupos de izquierdas. Sin saber nada, sin informarse, sin documentarse. Llegando incluso a vincular a los chicos de la <a href="http://twitter.com/#%21/acampadasol" target="_blank">acampada de Sol</a>, con grupos vinculados a ETA. ¿Este es el periodismo del siglo XXI?Juan Ant.http://www.blogger.com/profile/03073460607928765831noreply@blogger.com7tag:blogger.com,1999:blog-1420446277421972518.post-58089335801510714272011-04-10T12:33:00.000+02:002011-04-10T12:33:56.689+02:00Habemus tele¡Huy! ¡Pero si yo tenía un blog! ¿Se me había olvidado? ¿Se ha convertido en una víctima más de mi inconsciente desinterés hacia todo cuanto no representa una novedad? Sin duda, habré de poner más empeño en encajar las piezas del complicado rompecabezas que supone maximizar el aprovechamiento de mi escaso tiempo libre.<br />
<br />
En estas tres semanas de ausencia bloguera han sucedido unas cuantas cosas. Relatémoslas con una mezcla de importancia y cronología:<br />
<br />
1) Regresé con éxito del viaje que me tuvo <b>por tierras gallegas durante una semana</b>, concretamente en la ciudad de <a href="http://maps.google.es/maps?f=q&source=s_q&hl=es&geocode=&q=coru%C3%B1a&sll=40.396764,-3.713379&sspn=12.810611,33.815918&ie=UTF8&hq=&hnear=A+Coru%C3%B1a,+La+Coru%C3%B1a,+Galicia&z=13" target="_blank">La Coruña</a>, en la que no omitir el artículo es equivalente a llevar una camiseta que diga "no soy gallego". <i>In other words</i>: un gallego nunca diría <i>La Coruña</i>, siempre <i>Coruña</i>. Debe ser algo parecido a lo que ocurre con <a href="http://www.imdb.com/title/tt1033643/" target="_blank">Las Vegas</a> en EEUU.<br />
<br />
Lejos de las intenciones de mi viaje estaba escrutar el número de artículos y preposiciones utilizado por los autóctonos en sus conversaciones cotidianas: fui a visitar a la familia que tengo por allí, y a asistir cuanto pude en la exitosa intervención quirúrjica a la que se sometía uno de ellos. Bueno, dicho así parece que estuve dándole el bisturí al cirujano. Ya me entendéis.<br />
<br />
2) El pasado domingo 3 de abril se registraba el <b>primer abandono</b> de mi carrera deportiva en <a href="http://www.regiondemurciaorientacion.com/" target="_blank">Orientación</a>. Un minucioso análisis de lo ocurrido nos llevaría a concluir que el fracaso del domingo comenzaba a fraguarse el jueves: al encontrar los primeros huecos ya ocupados, hube de inscribirme a las 10:46, retrasando mi hora de salida en unos cuarenta minutos respecto a mi hora de salida habitual. En otras palabras, tuve menos tiempo del que suelo tener para completar la prueba.<br />
<br />
Tal vez debería haberme olvidado del reloj y, de forma relajada pero no exenta de concentración, haber acometido la prueba sin prisas. Pero no. Salí corriendo <i>como pollo sin cabeza</i> (© Agustín) y me convertí en un error andante. Me equivocaba y me perdía invariablemente, desde que tomé la salida hasta que consumé mi abandono. Un detalle pormenorizado de todos mis errores requeriría un artículo entero.<br />
<br />
3) Desde hace aproximadamente un año, me viene sucediendo un episodio de forma cíclica e irregular: cada mes, más o menos, decido que me voy a comprar una tele. Evalúo distintas opciones, pido consejo a amigos entendidos en la materia, consulto foros, analizo la eterna dicotomía Plasma vs LED, etc. Al final, son tantas las posibilidades y las variables a considerar, que acabo por aturullarme y, al grito de "¡<i>a tomar por culo</i>!", desisto, conservando mi JVC con sus 29'' y su culo gordo. 100Hz, eso sí. Cuando la compré, era una joya. 500 euros me costó.<br />
<br />
Esta vez, el calentón ha sido definitivo. Tras emplear las 24 horas del día durante una semana completa a tomar la decisión, he conseguido decantarme por un modelo y hacerme con él. Se trata de la nueva <a href="http://www.samsung.com/es/consumer/av/televisions/led-tv/UE46D8000YSXXC/index.idx?pagetype=prd_detail" target="_blank">Samsung D8000</a>, por la que el viernes di una señal de 100 euros, abonando el resto al transportista que vendrá a traérmela el lunes. ¡Estoy impaciente! ¿Se verá bien <b>mi nueva tele</b>? Apuesto a que sí.<br />
<br />
Ya he comprado patatas y frutos secos para estrenarla como se merece: con fondo verde.Juan Ant.http://www.blogger.com/profile/03073460607928765831noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-1420446277421972518.post-53393009308129242972011-03-19T09:52:00.000+01:002011-03-19T09:52:50.365+01:00La intervención militar en LibiaLa figura del dictador se caracteriza por establecerse en el poder, generalmente por la fuerza, sin valorar el rechazo de gran parte de su pueblo y de la comunidad internacional. Acceden a la poltrona tras una guerra o de forma hereditaria y se perpetúan en ella, censurando y castigando a todo aquél que ose cuestionar su supremacía.<br />
<br />
En el norte de África, en los últimos meses estamos presenciando revueltas del pueblo contra sus "líderes". La gente está harta y ha salido a la calle. Nadie es ajeno a cuanto está ocurriendo.<br />
<br />
<a name='more'></a>Actualmente, los acontecimientos nos sitúan en Libia. Ayer, <a href="http://www.europapress.es/internacional/noticia-consejo-seguridad-onu-aprueba-establecer-zona-exclusion-aerea-libia-20110317235516.html" target="_blank">el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas aprobó la intervención militar</a>, declarando la zona de exclusión aérea en Libia -en otras palabras, con el fin de evitar que Gadafi siga bombardeando, se prohíbe sobrevolar el espacio aéreo libio salvo con fines humanitarios, de rescate y demás intenciones no beligerantes- y preparándose para cualquier contingencia.<br />
<br />
Lo de Gadafi es uno de esos casos que clama al cielo: "<i>mi pueblo no me quiere: pues los mato a todos. Destruyo mí país entero si es preciso. Haré cualquier cosa antes que abandonar el trono o convocar elecciones".</i><br />
<i><br />
</i><br />
¿Está justificada la intervención militar en este contexto? Compete a las Naciones Unidas determinarlo, pero en cualquier caso no creo que cruzarse de brazos sea la opción más apropiada mientras el dictador asesina a miles de inocentes.<br />
<br />
¿Qué hace el sector repulsivo de la prensa española ante esta situación? ¡Sorpresa! Os invito a que leáis las <a href="http://kiosko.net/es/">portadas de hoy</a> de los principales diarios nacionales (repulsivos y no repulsivos). Repasemos:<br />
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- <a href="http://www.elpais.com/" target="_blank">El País</a>: <b>Las potencias europeas</b> lideran la <b>operación militar</b> contra Gadafi.<br />
- <a href="http://www.abc.es/" target="_blank">ABC</a>: <b>Zapatero, </b>sí a la <b>guerra</b>. (Foto grande de Zapatero con Ban Ki-Moon)<br />
- <a href="http://www.elmundo.es/" target="_blank">El Mundo</a>: <b>Zapatero </b>implica a España en una <b>guerra</b> para derrocar a Gadafi.<br />
- <a href="http://www.larazon.es/" target="_blank">La Razón</a>: Sí a la <b>guerra</b>. (Foto de Zapatero con Ban Ki-Moon).<br />
- <a href="http://www.publico.es/" target="_blank">Público</a>: Listos para el ataque. España se suma al <b>operativo de la OTAN</b>.<br />
<br />
Digna de mención me parece también la foto que aparece en El Periódico: no es de Zapatero <b>solo</b> sino de Obama, Cameron, Sarzoky y Zapatero.<br />
<br />
Los medios de la derecha, los de siempre, aprovechan la situación para verter un poquito más de sal al guiso. De nuevo <i>subliminalizan</i> sus portadas para hacer creer a sus lectores que Zapatero, de forma unilateral, ha mandado a las tropas a luchar en el frente. Con algunos conflictos recientes todavía en nuestra retina, no será extraño que el lector rápidamente rechace esta intervención y la considere de todo punto errónea y salvaje. Conseguir que el ciudadano de a pie pronuncie de nuevo los versos mágicos: "<i>el Zapatero este nos va a llevar a la ruina", </i>es su máxima.<br />
<br />
Confío en que los lectores exclusivos de prensa afín a su ideología amplíen sus miras y diversifiquen, comparen, prueben. Lean varias columnas y mézclenlas en sus cabezas. Piensen. Produzcan un juicio propio.<br />
<br />
No se dejen manipular por titulares. No caigan en el juego.Juan Ant.http://www.blogger.com/profile/03073460607928765831noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1420446277421972518.post-60711633795388143462011-03-12T16:14:00.000+01:002011-03-12T16:14:43.210+01:00El día nacional del pisco chilenoDesde el año 2008, cada 15 de mayo se celebra en <a target="_blank" href="http://es.wikipedia.org/wiki/Chile">Chile</a> el <a target="_blank" href="http://www.emol.com/noticias/nacional/detalle/detallenoticias.asp?idnoticia=358343">Día Nacional del Pisco Chileno</a>. El país austral rinde homenaje en este día a una de sus más antiguas bebidas, no exenta de cierta polémica por aquellas tierras ya que los peruanos reclaman para sí la originalidad del producto.<br />
<br />
La realidad, pese a las protestas peruanas, demuestra que la producción de este característico aguardiente de uva en los campos chilenos <a target="_blank" href="http://es.wikipedia.org/wiki/Pisco_chileno#Antecedentes">data del siglo XVI</a> -cuando se realizaron las primeras plantaciones en la ciudad de <a target="_blank" href="http://es.wikipedia.org/wiki/La_Serena_%28Chile%29">La Serena</a>- y que su producción anual es ampliamente superior a la obtenida por su vecino del norte.<br />
<br />
<a name='more'></a>En España, apenas conocemos el brebaje que hace las delicias del paladar de nuestros amigos chilenos y contribuye de forma positiva a sus procesos digestivos. No obstante, este desconocimiento no es óbice para que respetemos al pueblo chileno y sus tradiciones. ¿Nos causa algún perjuicio que la comunidad chilena residente en nuestro país celebre este día degustando su bebida favorita, sola o mezclada con coca-cola en lo que ellos llaman <a target="_blank" href="http://es.wikipedia.org/wiki/Piscola">piscola</a>? Yo diría que no. Tampoco he oído a nadie quejarse, <i>to be honest...</i><br />
<br />
Entonces, ¿por qué a ciertos sectores les incomoda el <a target="_blank" href="http://es.wikipedia.org/wiki/D%C3%ADa_Internacional_de_la_Mujer">día de la mujer</a> o el <a target="_blank" href="http://es.wikipedia.org/wiki/D%C3%ADa_de_San_Valent%C3%ADn">día de los enamorados</a> o el <a target="_blank" href="http://es.wikipedia.org/wiki/D%C3%ADa_Internacional_del_Orgullo_LGBT">día del orgullo gay</a>, por citar algunos? Hace unos días, el periodista <a target="_blank" href="http://es.wikipedia.org/wiki/Fernando_J%C3%A1uregui">Fernando Jauregui</a> decía en un debate televisivo que no aprobaba la existencia de "el día de <i>lo que sea</i>". En general. ¿Puede haber mayor muestra de rechazo a la libertad de expresión? Desafortunadamente, no es el único que piensa así.<br />
<br />
Valoro como una idea de lo más positiva la instauración de una fecha fija en el calendario para dar a conocer una actividad, una reivindicación, un producto o un colectivo, pues la única pretensión que esconden es la petición de reconocimiento/respeto/concienciación al resto de la sociedad. Una vez al año no parece demasiado, ¿verdad?<br />
<br />
En algunas ocasiones, estos días nos sirven para aprender que no hay que tildar de minoría a todo aquel movimiento que desconocemos o rechazamos. <br />
<br />
Algunos días figuran en el calendario por mera cuestión aniversaria: el <a target="_blank" href="http://es.wikipedia.org/wiki/Constituci%C3%B3n_espa%C3%B1ola_de_1978">día de la Constitución</a> o el <a target="_blank" href="http://es.wikipedia.org/wiki/23-F">23-F</a> son dos claros ejemplos. Considero altamente positivo que, año tras año, los medios de comunicación nos recuerden con detalle por qué se celebran estos días, qué ocurrió en el día que inició la secuencia de celebraciones. De lo contrario, poco a poco perderíamos la perspectiva histórica, tan necesaria para comprender el presente.<br />
<br />
Otros, como el <a target="_blank" href="http://es.wikipedia.org/wiki/D%C3%ADa_Internacional_de_la_Preservaci%C3%B3n_de_la_Capa_de_Ozono">Día Internacional de la Preservación de la Capa de Ozono</a>, procuran levantar la voz sobre temas que en nuestra cabeza ocupan un tercer o cuarto plano. Estos días señalados impiden que olvidemos por completo la existencia de problemas que, si bien no son los más críticos de cuantos nos acechan, no deben ser olvidados <br />
<br />
Disponemos de un calendario de días internacionales <a target="_blank" href="http://es.wikipedia.org/wiki/D%C3%ADa_Internacional">aquí</a>. Ojalá dentro de unos años asistamos al Día Internacional del Pisco Chileno.Juan Ant.http://www.blogger.com/profile/03073460607928765831noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1420446277421972518.post-70399121213862224752011-03-09T23:02:00.000+01:002011-03-09T23:02:58.520+01:00Para ser conductor de primera: ¡freeeena, freeeena!Hace unas semanas se anunciaba una nueva medida extraordinaria del gobierno y, como es preceptivo en estos tiempos de gatillo fácil e invariable condena, la maquinaria demagógica se puso en marcha sin demora.<br />
<br />
Yo lo confieso: no tengo ni idea de cuánto se va a ahorrar con la <a href="http://www.boe.es/boe/dias/2011/03/05/pdfs/BOE-A-2011-4120.pdf" target="_blank">nueva limitación de 110 km/h</a> impuesta a partir del 7 de marzo de 2011 en nuestras autovías y autopistas. Tampoco fui invitado a ninguna de las reuniones del gobierno en las que se fraguó la decisión, por tanto, no puedo revelar intenciones ocultas -como el incremento de la recaudación en concepto de multas de tráfico- de la misma. Por lo leído, observado y escuchado en los últimos días y haciendo una estimación, diría que en cada una de esas reuniones había diez o quince millones de personas, pues todo el mundo <strike>cree saber</strike> sabe a ciencia cierta mucho más de lo que el gobierno ha publicado. Diría que esto ocurre en casi todos los asuntos de cierta repercusión.<br />
<br />
<a name='more'></a>Como casi siempre, nada es blanco o negro ni hay una verdad absoluta: todas estas medidas, leyes o anteproyectos de ley están cargadas de un gran número de matices que, observados todos o al menos cuantos están a tu alcance, te dejarán con una interesante confusión si encaras el asunto desde la más rigurosa objetividad. ¡Ay, amigos! ¡Cuán difícil es esto último! ¿Verdad? <br />
<br />
Yo procuro ser objetivo. No es fácil, pero lo intento. Y de resultas de esta imparcialidad surge la verdadera duda. ¿Realmente se va a ahorrar algo con esta medida? No sé, parece que sí. ¿Tanto como dice el gobierno? En realidad no sé muy bien qué dice el gobierno, porque en tres comparecencias sucesivas el porcentaje de ahorro ha ido menguando. Empezó siendo <a href="http://www.elpais.com/articulo/espana/Gobierno/reduce/velocidad/maxima/autovias/autopistas/110/kilometros/hora/elpepuesp/20110225elpepunac_21/Tes" target="_blank">entre un quince y un once</a> (según si hablamos de gasolina o diésel) y ahora es <a href="http://www.antena3.com/noticias/economia/sebastian-admite-que-110kmh-solo-permitiran-ahorrar_2011022800052.html" target="_blank">un tres</a>. ¿O tal vez son porcentajes sobre bases distintas? ¿Lo están explicando <i>como el culo</i> o soy yo que no me entero de nada?<br />
<br />
El debate de la calle se construye en torno a los siguientes aspectos (el anidamiento en cada apartado simula una posible discusión entre un partidario y un detractor de la norma; nótese que no siempre comienza el mismo):<br />
<ul><li>Hay que tomar alguna medida para reducir el consumo de petróleo.</li>
<ul><li>Sí, pero es que del petróleo total que consumimos, sólo una pequeña parte está destinada a medios de transporte.</li>
<ul><li>Entonces, dado que en Detroit se consume más cocaína que en Cleveland, ¿renunciamos a combatir el problema de Cleveland hasta que lo erradiquemos en Detroit?</li>
</ul></ul><br>
<li>Esta no es una medida tan descabellada: actuaciones similares se han puesto en práctica varias veces a lo largo de la historia.</li>
<ul><li>Sí, pero eran otros tiempos. En aquella época los coches solían tener cuatro marchas, de manera que una vez colocada la cuarta -siempre antes de los 110 km/h-, cualquier incremento de velocidad implicaba un aumento de consumo. Ahora <b>no necesariamente</b> es así. </li>
</ul><br>
<li>El gobierno <b>lo hace</b> -que sí, que yo lo sé, que yo era uno de esos diez millones de aquella reunión- para recaudar más dinero en multas.</li>
<ul><li>Mucho habría que incrementar las sanciones actuales para compensar el déficit en recaudación de impuestos que se va a producir con esta medida.</li>
</ul><br>
<li>Pues yo te digo a ti que tanto no se ahorra. Ayer fui a casa de mi suegra a 110 y lo comprobé: no se ahorra tanto.</li>
<ul><li>Porque donde realmente se ahorra en combustible no es en la velocidad sino en las revoluciones por minuto. Tal vez redujiste una marcha para llevar el coche <i>más alegre</i>.</li>
<ul><li>Claro, porque en mi coche voy a 120 y pongo la sexta, mientras que a 110 tengo que ir en quinta. Uno de los agujeros de la ley es que la clave es el par óptimo del motor y, como cada coche es diferente, no existe una velocidad óptima para el consumo.</li>
<ul><li>Cierto, con dos matices: 1) Tu experiencia personal en tu viaje a casa de tu suegra no demuestra nada y 2) Si a 120 vas en sexta, probablemente a 110 también podrías ir en sexta. ¿O es que acaso tu reducción es de 150 a 110?</li>
</ul></ul></ul><br>
<li>Esta es una medida improvisada. Este gobierno deambula sin rumbo.</li>
<ul><li> ¿Improvisa porque toma decisiones no incluidas en el programa electoral de 2008? ¿Aquel programa debió prever cada una de las contingencias de los siguientes cuatro años? ¿Hizo mal en no prever en aquel entonces la crisis africana de 2011? En cualquier caso, ¿improvisar es siempre algo malo?</li>
</ul><br>
<li>Esto no se soluciona con prohibiciones. ¿Por qué no una campaña de concienciación?</li>
<ul><li>Estoy de acuerdo, en parte. Esta medida debe ir acompañada de un despliegue publicitario que nos explique la diferencia entre llevar el coche a 7000 RPM y llevarlo <i>ahogao</i>. Pero sólo con eso conseguiremos poco: ¿cuántas campañas de la DGT han pasado por nuestras pantallas? ¿Recordáis alguna que no pusiera los pelos de punta? ¿Cuándo se pudo afirmar con certeza que el número de víctimas había bajado? Cuando entró en vigor el carné por puntos. Sólo funcionamos a base de palos, así somos.</li>
</ul><br>
<li>Es que a 110 me aburro, me voy a quedar durmiendo.</li>
<ul><li>Ponte la radio. Piensa en tus cosas. Busca formas de mejorar el mundo. Busca formas de mejorar tu vida.</li>
</ul></ul><br><br />
Jugoso debate, qué duda cabe...<br />
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Recalco la que para mí es una de las claves: hasta la semana pasada, a 120 km/h en autovía eras adelantado cual tractorcillo en carretera comarcal. Por tanto, una parte importante de los conductores -probablemente los que más se quejan- han de reducir su velocidad media en 20 ó 30 km/h, no en 10. Y claro, molesta el doble o el triple, respectivamente.<br />
<br />
Quedaría incompleta esta reflexión sin alguna referencia a uno de los temas <i>estrella</i> de este blog: la manipulación periodística. Ayer, un amigo me hablaba de un reportaje de La Sexta. Sólo con citar el medio, ya veía venir cómo acababa el cuento: se va a ahorrar muchísimo. En la otra acera, todos los estudios coinciden en apuntar lo contrario: la medida es un gravísimo error. Los más irreductibles incluso insinúan que puede ser contraproducente.<br />
<br />
Rechazo con rotundidad el comportamiento basado en la generalización constante y sin excepción. En todo este asunto se está abusando de convertir un ejemplo aislado en una demostración fehaciente de cómo son las cosas. También suelo ponerme en guardia cuando una frase comienza por "la gente", especialmente si se conjuga en futuro: "la gente va a seguir yendo a la misma velocidad" al igual que, en otro contexto de reciente actualidad, se decía: "la gente va a dejar de ir a los bares". Especialmente, me irrita la generalización cuando procede de una insignificantemente representativa experiencia personal: "la gente va a seguir corriendo, porque yo ayer..." o en la prensa: "un redactor de nuestro diario fue ayer de Aranjuez a Pinto a 110 y luego volvió a 120, y comprobó que el ahorro era de ...".<br />
<br />
Para terminar: si digo que generalizar es malo, ¿estoy generalizando implícitamente pues aseguro que <b>siempre</b> es malo cuando tal vez no siempre lo es? ¿Me estoy metiendo en un bucle infinito?Juan Ant.http://www.blogger.com/profile/03073460607928765831noreply@blogger.com7tag:blogger.com,1999:blog-1420446277421972518.post-87464902295324065072011-03-06T21:38:00.000+01:002011-03-06T21:38:33.613+01:00Sensaciones habitualesHay ciertos episodios que se repiten a lo largo de nuestra vida, una y otra vez. Golpear salvajemente con el siempre vulnerable dedo meñique la dura pata de una mesa, beber un trago de agua cuando la sed nos castiga con fiereza o sentarnos en el trono a poner un huevo por la mañana, son momentos que tienen lugar con cierta regularidad, por más que intentemos evitar algunos de ellos. Su denominador común es que todos nos producen una sensación característica.<br />
<br />
Ayer, mientras pasaba la aspiradora y escuchaba música, entendí una estrofa de una canción que nunca había entendido. O, mejor dicho, que siempre entendí de otra forma, con profundo convencimiento de que así era. Y me puse a pensar en la cantidad de cosas que, de críos, aceptamos de cierta forma sin cuestionarnos. Posteriormente, algo más creciditos, reparamos en nuestro error y se nos crea un sentimiento contradictorio -y característico-: "¿cómo he podido creer algo durante tanto tiempo y estar equivocado? ¿Cómo reemplazo ahora una creencia tan firmemente establecida?". Para informáticos: ¿cómo modificamos algo que tenemos almacenado en nuestra <a href="http://es.wikipedia.org/wiki/Memoria_de_s%C3%B3lo_lectura" target="_blank">ROM</a>?<br />
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<a name='more'></a>Os pondré dos o tres ejemplos. La canción a la que me refería en el párrafo anterior es <a href="http://www.youtube.com/watch?v=c0OyALnOxE4" target="_blank">Barrio Triste</a>, de <a href="http://es.wikipedia.org/wiki/El_%C3%9Altimo_de_la_Fila" target="_blank">El Último de la Fila</a>. La letra habla de Marta, una chica de pueblo que se marcha a la capital, por amor. Una estrofa de la canción dice: "Marta Núñez Corregidor se crió en los montes como yo, pero se marchó con un operario de capital mayor que conoció en un ascensor". Mi pueril mente allá por el año 1990, asoció "capital" con "mayor" y entendió que se había ido con un rico. Y así lo he creído durante los últimos veinte años. En otra estrofa, la canción dice: "Marta Núñez Corregidor y su esposo, que es soldador, ven cada noche televisión...". Ayer, mientras la escuchaba, pensé: "¡Huy! ¿Es soldador? ¿Pero no era rico? ¿Es que se divorció del primero y se casó con un soldador? ¡No! ¡Claro! ¡Ahora lo entiendo! Lo que era mayor no era el capital, sino el operario...". Y claro, imaginaos la cara de tonto que se me quedó.<br />
<br />
Otro de estos simpáticos episodios tuvo lugar hace un par de años, aproximadamente. Atentos a la tontería: ¿cuántas veces habéis pasado por delante de un estanco? Miles, sin duda. ¿Os habéis fijado en el característico símbolo que acompaña al cartel de cada uno de ellos? Me refiero a este:<br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg9riA5DXLlFD2D8m0kxR1VQ5NHh4UolR5CU-As71rJfUD87AeNjLCjAbkLAa_D5M55wcEwcwXN28vMqdvTZYYUAoYlC4hqoiYrFRqn-zOlisb5SxN8L813SL1pPSVByiIDCoVCryQ6YX0/s1600/estanco.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg9riA5DXLlFD2D8m0kxR1VQ5NHh4UolR5CU-As71rJfUD87AeNjLCjAbkLAa_D5M55wcEwcwXN28vMqdvTZYYUAoYlC4hqoiYrFRqn-zOlisb5SxN8L813SL1pPSVByiIDCoVCryQ6YX0/s1600/estanco.jpg" /></a></div>Durante toda mi vida, creí que el simbolito en cuestión era una letra G. ¿Qué significado podría tener una letra G en el cartel de un estanco? Supongo que jamás me lo pregunté. Pero el caso es que terminé la EGB, BUP, COU, Selectividad, la carrera y posteriormente entré a trabajar, con la firme creencia de que es una letra G la que identifica de forma unívoca un estanco.<br />
<br />
Como os digo, hará un par de años, no recuerdo cómo salió la conversación -a saber-, pero el caso es que mi Gema me explicaba que era una letra T, rodeada por una hoja. ¡Y tiene lógica! La letra T de TABACOS, y la hoja del tabaco. ¿Cómo he podido vivir con ese error?<br />
<br />
Y, para terminar, otra de mis confusiones de toda la vida. Siempre creí que lo que aparece en esta señal de tráfico es un niño con un gorrito, caminando hacia la izquierda:<br />
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<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhbibOwpNCi8czB6oF_ngAnO0DhPZpf9PgqJB7-wNceF9jERNkSvftbP1pTN3qxe4S7F0Hu_k6ZlykD57-18jDmVD4ntTZOWwHovYfAbAwWPVtL024F5VhyGEaggPp2VO0NKalAJ4ZrPxg/s1600/deslizamiento.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhbibOwpNCi8czB6oF_ngAnO0DhPZpf9PgqJB7-wNceF9jERNkSvftbP1pTN3qxe4S7F0Hu_k6ZlykD57-18jDmVD4ntTZOWwHovYfAbAwWPVtL024F5VhyGEaggPp2VO0NKalAJ4ZrPxg/s1600/deslizamiento.jpg" /></a></div><br />
¿Tenéis algún ejemplo parecido?Juan Ant.http://www.blogger.com/profile/03073460607928765831noreply@blogger.com6tag:blogger.com,1999:blog-1420446277421972518.post-68700752654994796962011-03-04T20:26:00.000+01:002011-03-04T20:26:18.924+01:00Mourinho y la hipocresíaAllá por el mes de septiembre, se inició uno de esos absurdos cruces de declaraciones que tan escasamente nos suelen enriquecer. Procuro hacer caso omiso de todas estas banalidades, pero hay episodios que, a mi juicio, no deben pasar desapercibidos. Los protagonistas fueron Jose Mourinho, entrenador del Real Madrid, y Manuel Preciado, técnico del Sporting. El desencadenador, como no podía ser de otra forma, el primero de ellos. El portugués aseguraba que su máximo rival, el Fútbol Club Barcelona, parte con ventaja pues sus rivales no compiten contra ellos con la misma intensidad con la que se enfrentan al equipo capitalino. Y <a href="http://sporting.elcomerciodigital.com/noticias/2010-09-25/mourinho-acusa-preciado-regalar-20100925.html" target="_blank">materializaba sus quejas en la figura de Preciado</a>, al afirmar que presentó un once cargado de suplentes en el Camp Nou.<br />
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Por otra parte, en los últimos días Mourinho ha insinuado que todos los habitantes del planeta, excepto él, <a href="http://www.laopinioncoruna.es/deportes/2011/03/04/mourinho-vivimos-mundo-hipocrita/473533.html" target="_blank">somos unos hipócritas</a>.<br />
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<a name='more'></a><br />
Y la tercera y última pata de la mesa es el partido que ayer enfrentaba al Real Madrid contra el Málaga. El equipo andaluz reservaba a un gran número de titulares y acababa perdiendo 7-0. Tal vez con el equipo de gala habría perdido 5-0 ó 9-1, nunca lo sabremos. El caso es que su técnico, Manuel Pellegrini, decidió alinear ese equipo, y punto. Al acabar el partido, el chileno confesaba sin pudor que <a href="http://www.as.com/futbol/articulo/hemos-venido-disputar-puntos-real/20110304dasdasftb_1/Tes" target="_blank">no había viajado para disputarle los puntos al Real Madrid</a>. Aplaudo su sinceridad. Es algo muy lógico lo que debió pasar por la cabeza de Pellegrini la víspera del partido: "el domingo me juego mucho, tengo opciones de ganar a un rival directo y no perder el tren de la permanencia. Por tanto, prefiero tener la columna vertebral del equipo descansada para el domingo". <i>Chapeau</i>. Por la decisión y por la honestidad.<br />
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¿Y qué opina Mourinho del asunto? Pues ríanse conmigo amigos: esta vez dice que "<a href="http://www.antena3.com/noticias/deportes/futbol/mourinho-que-descanso-malaga-anormal_2011030400005.html" target="_blank">no le parece anormal</a>". ¿Esto sí está bien y lo de Preciado no? ¿Quién es el hipócrita?<br />
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Tal vez este individuo haga ganar títulos al Real Madrid, estoy convencido de que va a ser así. Sin embargo, está haciéndole un muy flaco favor al señorío que siempre ha profesado esta entidad.Juan Ant.http://www.blogger.com/profile/03073460607928765831noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-1420446277421972518.post-87142752637036160922011-03-02T21:47:00.000+01:002011-03-02T21:47:17.883+01:00La opinión en la prensa deportivaDurante toda mi vida he sido un gran consumidor de prensa deportiva. Con ocho o nueve años -o tal vez antes-, ya me gustaba comprarme el <a href="http://www.as.com/" target="_blank">AS</a>, que recuerdo costaba treinta y cinco <strike>pesetas</strike> de las antiguas pesetas. Por aquel entonces, al no haber recibido educación futbolera partidista en casa, simpatizaba con el equipo <i>por defecto</i> -léase la polisemia del término- de todos los españoles: el Real Madrid. Sí, tengo que reconocerlo. Durante algunos años de mi vida me deleitaba con los goles -con posterior voltereta o lo anulaban- de <a href="http://es.wikipedia.org/wiki/Hugo_Sanchez" target="_blank">Hugo Sánchez</a>, las fintas del <i><a href="http://es.wikipedia.org/wiki/Butrague%C3%B1o" target="_blank">Buitre</a></i> y las incursiones por banda de <a href="http://es.wikipedia.org/wiki/M%C3%ADchel" target="_blank">Míchel</a>. Menos mal que crecí...<br />
<br />
Años después, el aterrizaje de <a href="http://es.wikipedia.org/wiki/Cruyff" target="_blank">Cruyff</a> en el banquillo del Barça se alineaba con mi llegada a los 12 años. A esa edad se me abrieron los ojos y, de forma progresiva, fui tiñendo de azul y grana mis otrora blancos paños.<br />
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<a name='more'></a>Todo este periplo histórico carece de relevancia para el tema que nos ocupa: la prensa. En la época de mi despertar culé, alternaba irregularmente la compra de <a href="http://www.marca.com/" target="_blank">Marca</a> y <a href="http://www.sport.es/" target="_blank">Sport</a>. Éste, pese a su escasez global de contenidos -a excepción de un valioso suplemento semanal sobre fútbol sala- me mantenía al día en la actualidad <i>blaugrana</i>. Aquel, el diario <strike>nacional</strike> madrileño deportivo por excelencia, me proveía de información más completa sobre todos los deportes, aunque me obligaba a descartar sistemáticamente el primer 30% del periódico, obviamente prescindible por estar dedicado exclusivamente a cubrir los aconteceres <i>merengues.</i><br />
<br />
Pocos años después, y a medida que mi exigencia por la claridad narrativa de los redactores aumentaba, fui cambiando hacia <a href="http://www.elmundodeportivo.es/" target="_blank">El Mundo Deportivo</a>, en el que descubrí a <a href="http://twitter.com/criscubero" target="_blank">Cristina Cubero</a> y a algunos otros periodistas que escribían bastante bien. La insuficiente variedad en sus contenidos convirtió este prometedor idilio en <i>una mata que no echó. </i>Volví al Sport.<br />
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Si pensáis que bato récords de precocidad en la compra de diarios, mi afición a la prensa deportiva <b>por radio</b> no le va a la zaga: creo que empecé a escuchar a <a href="http://es.wikipedia.org/wiki/Jos%C3%A9_Mar%C3%ADa_Garc%C3%ADa" target="_blank">José María García</a> cuando (yo) sólo sabía decir "gugu tata". De hecho, el día que mis padres creyeron escuchar mi primera palabra y al habérsela perdido por culpa del volumen del televisor -elevado en exceso- me pellizcaron para que la repitiera, lo que oyeron fue: (pronúnciese con <a href="http://www.youtube.com/watch?v=9zkultaE4fY" target="_blank">voz de José María García</a>) "... hay goollll en la <a href="http://es.wikipedia.org/wiki/Nova_Creu_Alta" target="_blank">Nova Creu Alta</a>, marca el Sabadeelllll.....".<br />
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En los últimos años he ido reemplazando la prensa deportiva por la generalista, con El País como primer espada. Y más recientemente, he ido reduciendo el gasto en diarios y navegando en sus respectivas ediciones <i>online</i>, que ofrecen los mismos contenidos con una comodidad diferente. Con ventajas y desventajas. Obvio es.<br />
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Las conclusiones que saco últimamente son: la prensa en general está en horas muy bajas, debido a sus continuas imprecisiones y manipulaciones. La prensa deportiva tiene los mismos defectos, pero elevados al cuarenta y siete.<br />
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Hace unos días, en este blog, <a href="http://juanantoniosa.blogspot.com/2011/02/los-magos-del-diario-as.html" target="_blank">me indignaba con el diario AS por lo del error de infografía</a>. Le pedía, a los redactores de prensa deportiva, que no opinen más. Cada día estoy más convencido.<br />
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En general, sea en prensa deportiva o generalista (o en la sección de deportes de la prensa generalista), la opinión es un asunto delicado. Está presente en cada una de las líneas de un periódico, pues salvo que proporcione datos estadísticos fácilmente verificables, el periodista siempre aporta su granito de arena, bien sea empleando unas palabras concretas para transmitir unas sensaciones determinadas o directamente opinando sobre un tema sin aportar datos objetivos.<br />
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Lo único que exijo es una cierta dosis de rigor: no valores una cuestión sin conocerla en profundidad o, al menos, decirme desde el principio que no la conoces en profundidad y vas a <i>cabalizar</i> (=hacer cábalas). Yo lo hago continuamente en este blog, opino con frecuencia sobre cuestiones en las que soy relativamente profano, pero cuento con dos atenuantes para no ser criminalmente juzgado: 1) Suelo avisar al principio de mi bisoñez en la cuestión y 2) No soy un periodista que escriba en un influyente medio de gran tirada.<br />
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Por ejemplo, si en un periódico -sea deportivo o no- encontramos una crónica de un partido de fútbol, ¿no deberíamos exigir al redactor que, al menos, haya visto el partido? ¿Habéis leído alguna crónica de un partido que acabó en 0-0 en la que no se diga que fue un partido insulso y aburrido? Y la contrapartida: ¿a que siempre que un partido acaba 2-2 la crónica dice que fue un partido trepidante, con emocionantes alternativas y jugado a un altísimo nivel? Esto ocurre porque hacen la crónica sin ver el partido. Nos hacen perder el tiempo y esto es lo que realmente me cabrea.<br />
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Otra perlita: el otro día El País nos decía que <a href="http://www.elpais.com/articulo/deportes/Levante/ve/medio/salvado/elpepudep/20110228elpepidep_12/Tes" target="_blank">el Levante se ve medio salvado</a>. Increíble. Faltan 13 partidos y el Levante está a ¡¡¡TRES PUNTOS!!! del descenso. La semana próxima podría estar de nuevo en puestos de descenso. Y nos dicen que se ve medio salvado. <br />
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Al final acabaré creando alguna plataforma de esas que se llevan tanto hoy en día. O mejor dos: "Por una prensa deportiva compuesta sólo por estadísticas" y "No a la opinión en la prensa deportiva".<br />
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¿Se os ocurre alguna otra?Juan Ant.http://www.blogger.com/profile/03073460607928765831noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-1420446277421972518.post-24649850455328364242011-03-01T23:19:00.000+01:002011-03-01T23:19:04.036+01:00Curando lesionesHace un ratito volvía a casa tras la primera de <i>nosecuantas</i> sesiones de <i>fisio</i>, prescritas por el médico con el firme objetivo de averiguar si estoy viejuno o si tengo una lesión transitoria de la que pronto me recuperaré. Confío en que el veredicto apunte a la segunda opción o, al menos, a una combinación de ambas.<br />
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El lugar, una de esas clínicas de fisioterapia en las cuales reina la paz: hilo musical, apenas una o dos personas transitando por ahí, todo muy ordenado, muy cálido.<br />
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<a name='more'></a><br />
Esta <i>fisio </i>es la tercera persona que examina mi rodilla en las últimas semanas, tras mi médico de cabecera y la doctora del servicio médico de mi empresa. Los tres coinciden en lo mismo: "pues no te duele ninguno de los puntos que te he tocado: eso significa que lo mismo tienes una cosa que tienes otra...". Lo importante es no reconocer que se han dejado un punto por tocar.<br />
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Lo mejor ha sido el principio. No me esperaba tener que ponerme unas supergafas oscuras para que me trataran la rodilla. "Es que esto es láser, y ya sabes, hay que llevar protección". Pues nada, protección. Me he sentido <a href="http://es.wikipedia.org/wiki/Bono_%28m%C3%BAsico%29" target="_blank">Bono</a> con las gafas esas.<br />
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El siguiente paso ha consistido en la aplicación de <i>corrientes</i>. No sé muy bien qué fin persiguen ni cuál es su principio activo. El caso es que me han colocado una cinta azul con un chisme amarillo -conectado a una máquina- alrededor de la rodilla y al cabo de un ratito he empezado a sentir un hormigueo. La chica se ha ido y me ha dejado solo, no sin antes evidenciar que estoy tonto de capirote: "Dentro de unos minutos, cuando la rodilla se te acostumbre, no te molestará tanto la corriente, entonces le daremos más potencia; te dejo la máquina aquí al lado y le das tú, ¿vale?". "Vale". "Sólo tienes que pulsar este botón y después girar la rueda esta para ir aumentando la potencia". "Vale". "Cuando pulses el botón se encenderá esta lucecita y entonces podrás girar la rueda". "Vale". Transmitidas las instrucciones, se disponía a trasladarse a otra sala a atender a otro paciente, momento en el que la lucecita se ha apagado y yo me he puesto nervioso: "¡eh! ¡La lucecita se ha apagado!". "Ya. Sólo tienes que darle cuando vayas a aumentar la potencia". Se ha mordido la lengua para no añadir: "tal y como te acabo de explicar, tontobobo...". Me he identificado con los protagonistas de una <a href="http://www.youtube.com/watch?v=g3YiPC91QUk" target="_blank">magnífica escena</a> de los <a href="http://es.wikipedia.org/wiki/Monty_Python" target="_blank">Monty Python</a>, en su película <a href="http://www.imdb.com/title/tt0071853/" target="_blank">Los Caballeros de la Mesa Cuadrada</a>. El rey del castillo de Swamp da precisas instrucciones a sus guardianes para no dejar salir a su hijo, el Príncipe Herbert. Estos, no sin esfuerzo, finalmente comprenden las instrucciones... o tal vez no. Os dejo que la veáis.<br />
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En definitiva, intentaré ser paciente. Creo que esta es la primera vez en mi vida que no puedo practicar deporte por lesión. Principalmente, porque hasta el año pasado no había practicado deporte alguno, al menos con cierta intensidad. Un ocasional partido de fútbol-sala cada seis meses, no cuenta. Esta vez, las consecuencias morales son peores: tenía en mi <i>planning</i> alguna que otra media maratón para esta temporada invierno-primavera. Y me jode perdérmelas. Pero bueno, paso a paso.<br />
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En el viaje de vuelta hacia casa, he ido reflexionando sobre dos temas de suma gravedad y de los que tal vez postearé en los próximos días: 1) Las injustificadas prisas que siempre tenemos para todo y que nos causan muchos más perjuicios que beneficios y 2) me preguntaba si el verdadero problema del mundo, a día de hoy, es que sobra muchísima gente. Y en este caso hablo de cantidad (lo otro es obvio).Juan Ant.http://www.blogger.com/profile/03073460607928765831noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-1420446277421972518.post-35719774991816384562011-02-27T23:19:00.000+01:002011-02-27T23:19:09.793+01:00Orientación en La MarinaDomingo. Siete de la mañana. Suena el despertador. Estamos locos.<br />
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Cuando el reloj alcanzaba la escarpada cima de las ocho de la mañana, Gema y yo recogíamos a mi amigo Agustín -a quien veréis aparecer con cierta frecuencia en los comentarios de este blog- en su casa, y nos dirigíamos a <a href="http://maps.google.es/maps?f=q&source=s_q&hl=es&geocode=&q=la+marina,+elche&aq=&sll=40.396764,-3.713379&sspn=8.130742,19.753418&ie=UTF8&hq=&hnear=La+Marina,+Elche,+Alicante,+Comunidad+Valenciana&ll=38.134489,-0.650983&spn=0.016405,0.038581&t=h&z=15&iwloc=A" target="_blank">La Marina</a> (Alicante), donde tenía lugar una nueva carrera de orientación, organizada esta vez por la Universidad de Alicante, lo que ha propiciado que concurriera al evento un gran número de jóvenes universitarios y universitarias. Además, la carrera era la cuarta del año puntuable para la Liga Regional de Murcia y valedera también para la Liga de la Comunidad Valenciana, el Campeonato Autonómico de Deporte Universitario y el Campeonato Escolar de la Comunidad Valenciana. Ahí es nada...<br />
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<a name='more'></a>Llegamos al punto de salida sin contratiempos. La ruta trazada por mí la noche anterior y que inteligentemente concatenaba diversas vías comarcales y autopistas de forma alternativa, optimizando a la vez en kilómetros y en tiempo, era completada sin errores. No puedo decir lo mismo de lo ocurrido durante la prueba de orientación: ahí he vuelto a ejercer mi condición de "corredor sacrificado", encargándome de que ninguna criatura del Señor -excepto yo- quede último en mi categoría. Como todavía no han salido las clasificaciones, aún guardo alguna esperanza de ser penúltimo.<br />
<br />
El terreno por el que discurría la prueba era de características distintas al que solemos encontrar por las sierras murcianas: vegetación frondosa en la mayor parte del mapa, continuos cambios de color -o lo que es lo mismo, de tipo de suelo-, caminos que no son caminos -o así me lo ha parecido a mí- y muchos pinos bajos. Ramas secas <i>por tos laos</i>. Llevo el cuerpo completamente desollado.<br />
<br />
He empezado bien. A diferencia de ocasiones anteriores en las que perdía mucho tiempo localizando la primera baliza, esta vez hilvanaba una brillante serie de aciertos a las primeras de cambio. Durante las primeras cinco balizas, me comporté como el experimentado corredor que algún día llegaré a ser. Sin embargo, cuando encaraba la baliza seis, fui poseido por un ataque de hambre.<br />
<br />
Saqué el kit de emergencia que siempre llevo en el bolsillo del pantalón en estas ocasiones, compuesto por unas parrillas, dos gavillas de leña, un encendedor, medio kilo de panceta, dos morcillas, un <i>puñao</i> de sal y la bota de vino. Y me senté en una piedra a almorzar tranquilamente. Buche lleno y <i>tablao</i> recogido, me puse en marcha para encontrar mi sexta posta. Y no fue difícil encontrarla. En total, perdí "sólo" 22 minutos.<br />
<br />
Naturalmente, nada del párrafo anterior ocurrió realmente, como entenderá el avispado lector. Los 22 minutos empleados en alcanzar la sexta baliza fueron producto de mi baja tasa de aciertos en ese intervalo de tiempo. Por decirlo de alguna forma...<br />
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Riéndome de mí mismo, continué la prueba tras la retahíla de errores desplegados en la mencionada búsqueda de la sexta baliza. Un recorrido conservador -en ocasiones demasiado, tal vez- me garantizaba no perderme en exceso a la vez que un tiempo modesto. Y todo fue más o menos bien hasta que encaraba la penúltima baliza, cuando me junté con tres o cuatro fulanos que se encontraban tan perdidos como yo: ¿dónde <i>the hell</i> está la baliza 49?, nos preguntábamos. Nos pasó, como bien me explicaba después Agustín cuando le relaté los hechos, algo muy habitual: llegas al final cansado y te dejas llevar por los que van delante. Si oyes a uno decir que no encuentra la 49, por inercia te colocas junto a él a buscarla, en lugar de pensar "es posible que este señor no la encuentre porque está equivocado en algo; pensaré por mí mismo en lugar de ser arrastrado por su error". Pero no es precisamente esa sensatez la que te dirige en ese momento.<br />
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Al final, dos horas y once minutos de tiempo final. Mi querida Gema, hecha toda una campeona, completaba su carrera (de un kilómetro menos que la mía aproximadamente) en una hora y treinta y tres minutos. ¡Cómo progresa la tía!Juan Ant.http://www.blogger.com/profile/03073460607928765831noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1420446277421972518.post-74418054945783765332011-02-26T14:14:00.002+01:002011-02-26T15:10:20.929+01:00Psicología de andar por casaDisponemos de una gran abundancia de recursos que nos enseñan técnicas para cultivar nuestro cuerpo. Desde el más básico mantenimiento hasta la más avanzada musculación, podemos optar por un sinfín de tablas de ejercicios que mantendrán nuestro cuerpo <i>fat-free</i>, cuanto menos.<br />
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Más dispersas y confusas se nos muestran las opciones para el perfeccionamiento de nuestra mente. ¿Acaso es menos importante ser feliz con nosotros mismos que tener un <i>cuerpo diez</i>? ¿Estamos tan obsesionados con mitigar ese antiestético michelín que no alcanzamos a comprender que lo que nos atormenta no es realmente ese <i>pliegue de gordura </i>(según dicta <a href="http://buscon.rae.es/draeI/SrvltConsulta?TIPO_BUS=3&LEMA=michelin" target="_blank">la RAE en la definición de michelín</a>) sino la profunda <i>autoincomprensión</i> de la que adolecemos?<br />
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<a name='more'></a><br />
Pues sí. Estoy convencido de que así es. El profundo sosiego que sentimos tras una sesión de gimnasio se va al traste cuando se nos pone en rojo un semáforo que confiábamos en franquear sin demora. ¿Por qué ocurre esto? Aún a sabiendas de que mis dos lectoras licenciadas en psicología descargarán contra mí toda su ira por disertar sobre aquello que desconozco, os diré por qué: no dedicamos ni un minuto al día a trabajar nuestra forma de pensar, de reaccionar contra las vicisitudes que se nos plantean; a <i>manipular</i> nuestra mente de la misma forma en que lo hacemos con nuestro cuerpo. (Me niego a<i> eufemismizar </i>la palabra manipular: me da igual si en otros contextos tiene connotaciones negativas, en éste no la tiene en absoluto).<br />
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Los -pocos- que hayáis llegado hasta el cuarto párrafo estaréis remangados, desafiantes, preguntándome: "sí, vale, hay que trabajar la mente, ¿pero cómo? ¿Tan fácil lo ves?". Paciencia, querido lector. Abordaremos ese tema en breve.<br />
<br />
Antes, considero apropiado separar nuestro trabajo psicológico en dos grandes áreas: el largo y el corto plazo. Dentro del primero entraría la administración de las sensaciones originadas por situaciones que están presentes en nosotros durante mucho tiempo, por ejemplo, las relaciones de pareja, familiares, laborales, estudiantiles, etc. En general, las que se basan en nuestra pertenencia a un colectivo, de dos o más personas, durante un periodo de tiempo indeterminado. En el segundo grupo incluiríamos el efecto que nos provocan las trescientas mil pequeñas cosas que nos ocurren a lo largo del día y que, por suma, pueden ejercer entre nosotros el mismo efecto nocivo que el primer grupo.<br />
<br />
La necesidad de separar entre ambos grupos radica en la facilidad para ignorar el segundo: creemos que nuestra desdicha es únicamente originada porque no soportamos a nuestro jefe, porque estamos en el paro o porque no aprobamos ni una. Sin embargo, en muchas ocasiones nuestro verdadero problema es que no sabemos gestionar los pequeñísimos fracasos. El semáforo en rojo, la inesperada cancelación de una cita con un amigo, el haber creído que hoy era martes y cuando nos disponíamos a ver el nuevo capítulo de nuestra serie favorita descubrimos que es miércoles. A lo largo del día, se suceden de forma continua hechos de insignificante relevancia que, de no saber ponderar de forma adecuada, contribuirán a incrementar nuestra desdicha de forma incalculable y en progresión geométrica. ¿Cuál es la clave? No existe receta que sirva para todo bicho viviente. Tal vez lo único común sea la necesidad de separar estos sucesos, unos de otros. Sí, algo tan aparentemente básico como esto, generalmente se nos resiste. Sin darnos cuenta, conseguimos que la angustia que nos provoca el examen que tenemos la semana que viene y para el que no hemos estudiado nada, se vea agravada porque ha perdido mi equipo de fútbol favorito. Separemos, separemos, separemos. Separemos los problemas. Repitámonos una y otra vez esta monserga: no mezclemos cosas que no tienen nada que ver.<br />
<br />
Una vez separados los problemas, actuemos sobre cada uno de ellos. Apliquemos ese viejo proverbio chino que decía algo así: "Si un problema tiene solución, no debe preocuparte. Si no tiene solución, ¿por qué te preocupa?". Si el semáforo ya está en rojo, ¿qué podemos hacer? El proceso a seguir para abordar cada problema individual merecería un artículo entero, tal vez un blog entero, por lo que se escapa a los objetivos de este artículo.<br />
<br />
Volviendo a la segmentación en dos tipologías de problemas, reflexionemos brevemente sobre el primero y probablemente más difícil. ¿Cómo avanzamos en una vida tan cargada de contratiempos sin desmoronarnos? ¡Uf! ¡Difícil! Pero no imposible...<br />
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Una de las claves es ser capaz de reconstruir nuestro camino tras un contratiempo. Tenemos que vivir con la filosofía de uno de esos aparatitos GPS que ahora <strike>llevamos</strike> lleváis en los coches y que han sustituido, por completo, el romanticisimo del mapa de carreteras por la sobriedad de la precisión. ¿Qué hace un GPS cuando, por cualquier motivo, te has pasado el desvío que te indicaba el cacharrito? Automáticamente y sin dilación, recalcula la ruta. Obvia cualquier decisión o contratiempo pasado y se pone manos a la obra a planear un nuevo itinerario. No importa de donde vengas, sólo importa dónde vas. El maléfico trasto no juzga tus errores pasados: sólo pretende que alcances un objetivo. ¡Apliquémonos el cuento! ¿Por qué no somos capaces de reaccionar así ante los contratiempos de la vida diaria? Por dos razones: porque es difícil y porque <b>no lo intentamos</b>.<br />
<br />
Ejemplos: suspendo un examen. Perfecto. Desde que veo la nota hasta que asumo que las únicas consecuencias son que tendré que estudiarlo de nuevo, me dedico a atormentarme. ¿Con qué fin? ¿Qué consigo? ¿Me sube medio punto la nota cada cabezazo que me doy contra el pico del pasillo? Me temo que no. No digo que sea fácil pensar así, pero al menos intentémoslo. Os garantizo que podemos conseguir grandes resultados.<br />
<br />
Podríamos poner muchos ejemplos más, seguro que ahora mismo a todos se os ocurre alguno. Para todos ellos podemos aplicar el mismo principio: pasemos página <b>cuanto antes</b>, recalculemos la ruta.<br />
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Como una vez me dijo mi brillante cuñada filósofa, "tú siempre hacia delante; hacia atrás, ni para tomar impulso...".<br />
<br />
Asumo que mis mencionadas -y admiradas- lectoras psicólogas me arrojarán toda clase de objetos punzantes por practicar el intrusismo en su profesión. O tal vez este intrusismo sea sólo comparable al que ejerce en la Informática quien se instala el Office.Juan Ant.http://www.blogger.com/profile/03073460607928765831noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-1420446277421972518.post-2123203191238890172011-02-24T14:56:00.003+01:002011-02-24T20:54:20.803+01:00Periodismo del bueno en la sierra andaluzaMotivado por la admiración que profeso al brillante trabajo que realizan los chicos de <a href="http://www.elmundotoday.com/" target="_blank">El Mundo Today</a>, intenté ponerme en contacto con una de sus redactoras con el fin de concertar una entrevista para <acronym title="El Blog de Juan Antonio S.A.">EBDJASA.</acronym><br />
<br />
No fue difícil localizar a Angelita, quien compagina su tarea de escritora y reportera con la de profesora de apoyo en un instituto de <a href="http://es.wikipedia.org/wiki/Puebla_de_Don_Fadrique" target="_blank">Puebla de Don Fadrique</a> (<a href="http://es.wikipedia.org/wiki/Provincia_de_Granada" target="_blank">Granada</a>). Allí nos recibió el pasado viernes alrededor de las once de la mañana, cuando acababa de impartir su última y única clase de ese día.<br />
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<a name='more'></a><br />
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Nos encontramos una chica de estatura media y expresión alegre pero agotada por el "<i>excesivo trabajo"</i> que desarrolla a lo largo del día. "<i>Si es que cuanto menos haces, menos quieres hacer: antes trabajaba en la fábrica de la Hero, en Alcantarilla, un turno de doce horas diarias; ahora apenas trabajo cuatro, entre el periódico y los críos, y se me hace mucho más pesao", </i>explica.<br />
<br />
Le preguntamos en qué artículo está trabajando actualmente, cuestión que casi le provoca un atragantamiento pues intenta contestar sin terminar de tragar el <i>croissant </i>que previamente había ahogado en un barreño de café con leche<i>. "Sí, ahora mismo estoy preparando un reportaje para cubrir la manifestación de ositos de peluche contra el maltrato de mascotas; quiero decir, del maltrato que reciben ellos de las mascotas, que se conoce que les pegan, les muerden, los rompen. ¡Ya está bien! Es una injusticia que los peluchitos tengan que sufrir lo mismo que la chica ésta... ¿cómo se llamaba? Antonia no sé qué... bueno, da igual, la actriz ésta de la película esa que nunca me acuerdo...". </i>"<i>¿</i><a href="http://www.imdb.es/title/tt0350193/" target="_blank"><i>Te doy mis ojos</i></a><i>?". "No, hombre, esa no: yo digo una película española sobre los malos tratos". "Bueno, </i><a href="http://www.imdb.es/title/tt0350193/" target="_blank"><i>Te doy mis ojos</i></a><i> es una película española sobre los malos tratos</i>", insisto. <i>"Ya, pero esa no es... ¡joer! ¡Qué rabia! Esto es igual que cuando no me acordaba del actor aquel, ¿te acuerdas Joaquín?", "Sí, el Kevin Bacon ese, menuda me diste...", </i>protesta el mesonero<i>. </i>Angelita, indignada, le replica "<i>¡toma! ¡si no me acordaba! ¿qué voy a hacer? Pues darle vueltas hasta que lo encuentre...". </i>Mirándome a mí, añade: "<i>es que yo soy mu cabezona pa estas cosas: el año pasado, estuvimos todas las vacaciones de verano mi cuñá y yo intentando acordarnos de la española aquella que no le dieron ni un voto en Eurovisión, ¿cómo era?... ¡uh! ¡Remedios Amaya! ¡Casi me vuelve a pasar otra vez lo mismo! ¡Casi se me olvida el nombre!". </i>A continuación soltó una larga y sonora carcajada que mantuvo al resto de parroquianos mirándonos durante treinta o cuarenta segundos.<br />
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<i>"Pues yo, hasta que no me acuerde de la película esa, no paro, ¿eh? ¡Avisado estás!", </i>advirtió. Yo traté por todos los medios de seguir la entrevista, pues había preparado varias preguntas sobre reportajes anteriores, posibles investigaciones futuras y acerca de las relaciones con los medios de la competencia. Pero no hubo manera.<br />
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<i>"Mira, vamos a hacer una cosa: vente que le vamos a preguntar a mi hermanico Rafael que tiene muy buena cabeza para estas cosas. Hace dos o tres años, en Nochevieja, que él la pasó con sus suegros porque ese año había pasado la Nochebuena con mis padres, que también son los suyos y, por tanto, la Nochevieja le tocaba con los suegros, vino después a la casa a felicitar el año y conforme llegó le pregunté que cómo se llamaba el ruso aquel calvo que tenía una mancha en la cabeza, el Gorbachov ese, que llevaba yo dándole vueltas desde por la mañana, y na más llegar me lo dice. Si es que mi hermanico es mu apañao y mu listo...". </i>Desconecté los oídos durante los siguientes siete minutos.<br />
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Subimos a ver al susodicho hermano. Me presentó como un periodista de "<i>el bloc de no sé quién"</i> que había venido a hacer un reportaje sobre el colegio. Rafael me contó que desde que sus crías habían puesto Internet en la casa, ya no les veía el pelo. "<i>A la mayor luego a luego la veo de vez en cuando, pero a la pequeña, nanai</i>"<i>. </i>Nos agasajó con unos pacharanes, excedentes de turrón todavía en perfecto estado, <a href="http://www.miguelitosdelaroda.com/tienda/" target="_blank">Miguelitos de La Roda</a> y una panera llena de peladillas.<br />
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Y así transcurrió el resto de la mañana, entre risas y el relato pormenorizado de un gran número de anécdotas. Olvidé por completo para qué me había desplazado a aquel bello pueblo de la provincia de Granada de modo que, finalizadas las viandas, me despedí de ambos hermanos y me marché.<br />
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En el coche, camino de Murcia, recordé el motivo del viaje y, profundamente contrariado por no haber conseguido mi objetivo, no me dirigí la palabra durante el resto del trayecto.<br />
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Ahora, con la mente fría tras dejar pasar unos días, he creído conveniente contaros mi aventura y recomendaros que visitéis aquel pueblo. No os defraudará.Juan Ant.http://www.blogger.com/profile/03073460607928765831noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-1420446277421972518.post-74233777491198744482011-02-23T14:49:00.000+01:002011-02-23T14:49:23.046+01:00El 23-F: una fecha claveEn el año 1981, el día 23 de febrero se hizo un hueco en la historia de las fechas célebres de nuestro país. Desde aquel día, los medios de comunicación repiten año tras año las mismas imágenes, los mismos sonidos, los mismos textos. No me parece mal, pese a lo reiterativo. Es parte de nuestra historia y veo razonable que, al menos, dediquemos un día al año a recordar cada uno de nuestros puntos de inflexión.<br />
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En lo personal, la fecha del 23-F es importante por otro motivo. Justo cuatro años antes de la entrada de Tejero en el Congreso de los Diputados al grito de "<em>to el mundo al suelo"</em>, nacía uno de los mejores amigos que he tenido en toda mi vida.<br />
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<a name='more'></a>Se llama Carlos y hoy cumple treinta y cuatro años, de los cuales ha compartido conmigo -con mayor o menor proximidad física pero cercanía afectiva constante- los últimos veintiocho, aproximadamente. <br />
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Es uno de los grandes culpables de que mi vida avance tan rápido: yo cumplo años en octubre y apenas cuatro meses después mi generación sube un nuevo escalón. A partir de hoy, siento los treinta y cuatro más cerca.<br />
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Nos conocemos desde el colegio: en septiembre de 1983 comenzaba nuestra andadura en el <a href="http://www.colegiofatima.net/" target="_blank">Colegio Nuestra Señora de Fátima</a>, en Valencia. Yo llegué a aquel colegio en el segundo año de mi establecimiento en la ciudad a la que llegué procedente de Albacete debido a un traslado laboral de mi padre. Él, natural de Valencia, allí vivía y allí sigue viviendo.<br />
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Cuando apenas contábamos siete primaveras, su intuida madera de líder devino en realidad: no era extraño encontrarle sentado en su silla, repantigado hacia atrás, con todas las niñas de la clase ofreciéndole carantoñas alrededor de su mesa. Unas sentadas en ella, otras detrás de él. Lo asemejaría al anfitrión de algún exitoso programa de televisión, fielmente guarnecido por sus bellas azafatas. La envidia de todos, obviamente.<br />
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Lejos de tenerle celos, le admirábamos y le queríamos.<br />
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Brillante analista futbolístico en la actualidad, nunca destacó en la práctica del balompié. Recuerdo que en aquellos partidos masivos en el patio del colegio, en los que nos enfrentábamos unos quince contra veinte con cualquier objeto -rodara o no- a modo de balón, solía colocarse de extremo. Pedía el balón con graves aspavientos y rara vez solía enganchar una volea. Eso sí, cuando la enganchaba, temblaba Roma... y los que veían el partido desde el otro córner.<br />
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En la adolescencia, formó parte del pelotón de cabeza de la clase. Ese grupo de amigos que siempre van por delante del resto, que maduran a un ritmo mayor. En otras palabras: los que fuman. Él era el único del grupo que no fumaba. Y no pasaba nada. Diréis: "<em>claro, normal, no tiene por qué fumar".</em> Puede ser. Si cualquier otro entraba en ese grupo y no fumaba, era vilipendiado al punto.<br />
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Los años anteriores a mi traslado a Albacete en el año 1997 estuvieron plagados de costumbres memorables: las largas madrugadas en mi casa oyendo <a href="http://es.wikipedia.org/wiki/Hablar_por_hablar_(Cadena_SER)" target="_blank">Hablar por Hablar</a> y <a href="http://es.wikipedia.org/wiki/Si_amanece_nos_vamos" target="_blank">Si Amanece Nos Vamos</a>, noches enteras saqueando la cocina cada media hora y jugando al ordenador, con aquel viejo 286 (Gates G2-12, creo recordar) de mi hermano. También los interesantísimos partidos de fútbol con un <a href="http://www.todocoleccion.net/baraja-super-gol-futbol-marca~x15581211" target="_blank">juego de cartas y tapete que vendía el Marca</a> y las no menos apasionantes veladas de <a href="http://es.wikipedia.org/wiki/Subbuteo" target="_blank">Subbuteo</a>, juegos ambos a los que él siempre solía <em>pulirme</em>, como me recuerda cada vez que nos vemos.<br />
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El último gran proyecto que definimos juntos en aquella etapa fue escribir un libro de forma conjunta. Carlos me planteó un día: "<em>nano, ¿por qué no nos curramos un libro a medias? Tú escribes un capítulo, yo otro, y así sucesivamente hasta que lo terminemos</em>". La conjugación del verbo <em>currar</em> está presente en dos de cada tres frases que pronuncia.<br />
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No llegamos a escribir aquel libro, pero soñamos con él varias veces en su chalet, en aquellas noches de verano en las que nos juntábamos para estudiar.<br />
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Como os decía al principio, los últimos años nos han distanciado físicamente manteniendo nuestra amistad intacta. Aunque él vive en Valencia y yo en Murcia, esta distancia de unos 230km no fue óbice para que viniera a Murcia dos veces para mi boda: la primera para firmar como testigo en el juzgado, y la segunda, algunos días después, para asistir a la ceremonia. De la primera cita guardo incólume el recuerdo de la víspera de la firma: llegamos a casa a las tres de la mañana y en lugar de irnos a dormir -teníamos que levantarnos a las siete-, nos sentamos en el suelo del balcón y nos bebimos media botella de ron -solo- hasta que el sol se desperezaba. Dormimos media hora, y al juzgado. Del día de la boda recuerdo cuando -por sorpresa de mi cuñada Inma- nos deleitaron con un reportaje fotográfico en pantalla gigante. Cuando apareció una foto de toda la clase de segundo de EGB, me levanté de mi asiento y corrí a buscarle. Nos fundimos en un estruendoso abrazo.<br />
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¡Te quiero, <em>nano</em>!Juan Ant.http://www.blogger.com/profile/03073460607928765831noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-1420446277421972518.post-21257563542829463772011-02-21T22:58:00.001+01:002011-02-21T22:58:59.763+01:00Los magos del Diario AsLa prensa española sigue acumulando éxitos. Hoy, el <a href="http://www.as.com/" target="_blank">Diario As</a> nos ha regalado una nueva muestra de desfachatez e indecencia para añadir a la colección: una de las manipulaciones más evidentes de las que tenemos constancia en los últimos tiempos.<br />
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<a name='more'></a>Los hechos son éstos: en los primeros minutos del partido de ayer, el Barça se adelanta en el marcador ante el Athletic de Bilbao. El gol es anotado por Villa a pase de Dani Alves, quien realiza el centro al área tras una arrancada que inició en posición dudosa. Una más de esas jugadas que para unos será fuera de juego y para otros no. Digo ahora <a href="http://juanantoniosa.blogspot.com/2011/01/copa-del-rey-ida-de-las-semifinales.html" target="_blank">lo mismo que dije</a> al hilo de aquel "gol fantasma" que salvó Albiol contra el Sevilla: dado que es imposible que el árbitro tenga la total seguridad de que está en lo cierto, no debe sancionar una infracción o conceder un gol. Por tanto, acierta tomando esa decisión.<br />
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Nuestros amigos del As han ido un paso más allá. Observen lo que publican en su web:<br />
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<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="http://www.as.com/recorte/20110221dasdasftb_15/LCO/Ies/Barcelona-Athletic.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;" target="_blank"><img border="0" height="295" src="http://www.as.com/recorte/20110221dasdasftb_15/LCO/Ies/Barcelona-Athletic.jpg" width="400" /></a></div><br />
La imagen superior es la que ha aparecido en su edición impresa, esta mañana <i>tempranico</i>. La imagen inferior es la que han colocado en su web junto a la anterior <a href="http://www.as.com/futbol/articulo/pedimos-disculpas-error-infografia-1-0/20110221dasdasftb_3/Tes" target="_blank">para pedir disculpas</a> por el <i>error de infografía</i> cometido en el periódico. ¿Error de cuálo? ¿Me están diciendo que desaparece un jugador del mapa por un error? ¿Cuál fue el error? ¿Abrir la redacción? Si es ese, admito las disculpas.<br />
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Para profanos en la materia, lo que el diario <strike>madridista</strike> madrileño intenta es inducir al despistado lector a pensar que había un claro fuera de juego y que al Barça le regalan los partidos, como suelen protestar estos señores de la prensa en no pocas ocasiones. Manipulemos, <i>one more time</i>. Derrotemos al rival con la calumnia y el descrédito. ¿Al rival?<br />
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Pidiendo disculpas no hacen sino reconocer su maquiavélico proceder.<br />
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Aprovecho este rinconcito que me he autocreado en Internet para pedir un favor a la prensa deportiva, no importa de qué color sea: por favor, <b>no opinen más</b>. Nunca más. Limítense a decirme los resultados, las alineaciones y las incidencias de los partidos. Cuéntenme el escrutinio de la quiniela y apórtenme datos tan irrelevantes como curiosos. Por ejemplo, aclárenme esa duda que siempre tuve sobre la cantidad de empates producidos entre equipos de la misma comunidad autónoma o cuántos minutos lleva sin marcar un lateral izquierdo con perilla. Pero, por favor, no opinen más. No me digan si el árbitro acertó, si fue penalty o no fue, si el Málaga debió quedarse con nueve en el minuto treinta. Me da igual. Ustedes no tienen ni puta idea de cuánto puede influir un árbitro en un partido, sin necesidad de existir "jugadas polémicas". Pregunten a cualquier socio de cualquier equipo pequeño.<br />
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No me digan quién va a ascender a primera ni quién va a perder la categoría. No lo saben. Y me da igual lo que opinen.<br />
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Estoy harto de leer y escuchar opiniones absurdas. Os prometo que cada vez consumo menos prensa deportiva. Me alegro de que continúen acumulando méritos para que la abandone por completo.Juan Ant.http://www.blogger.com/profile/03073460607928765831noreply@blogger.com7tag:blogger.com,1999:blog-1420446277421972518.post-36324096884482315132011-02-20T22:32:00.002+01:002011-02-20T22:33:27.947+01:00Nueva prueba superadaPese a haber hecho la peor puntuación en lo que llevamos de temporada -sólo son 43 puntos los que añado a mi ranking-, de nuevo el balance es positivo. Al igual que en la <a href="http://juanantoniosa.blogspot.com/2011/02/orientacion-en-modalidad-score.html" target="_blank">ocasión anterior</a>, partía con la finalización de la carrera con pocos errores como único objetivo. Me voy satisfecho, pues considero que he cumplido este objetivo tan subjetivo. Voy consolidando conocimientos, cometiendo cada vez menos errores. Poco a poco.<br />
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<a name='more'></a>Esta vez, además, partía en condiciones físicas inferiores respecto a otras citas, dado que <a href="http://juanantoniosa.blogspot.com/2011/02/las-fiestas-privadas-del-mentidero.html" target="_blank">la fiesta del viernes</a> y mi rodilla, todavía no curada, mermaban mis fuerzas considerablemente. Pero bueno, he hecho lo que he podido.<br />
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Los todavía no iniciados en esto de la <a href="http://juanantoniosa.blogspot.com/2011/01/la-orientacion.html" target="_blank">Orientación</a>, tal vez os preguntaréis de dónde salen esos 43 puntos y para qué sirven. Os explico: a lo largo de este año 2011 se disputarán 17 pruebas. En cada una de ellas, el corredor consigue una puntuación. Al finalizar el año sumaremos las 13 mejores carreras y obtendremos la puntuación final. ¿Qué puntuación obtienes en cada carrera? Se calcula como el tiempo del ganador (multiplicado por 100) dividido entre tu tiempo. Por ejemplo, si el ganador hace una hora y tú haces dos horas, obtienes 50 puntos. El ganador siempre suma 100 puntos. ¿Por qué se consideran únicamente 13 carreras y no todas? No lo sé oficialmente, pero imagino que será para premiar más al buen corredor que al que no se pierde una.<br />
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Naturalmente, a estas alturas de mi trayectoria orientadora no me debe preocupar el ranking, ni sumar más o menos puntos. Es sólo un dato que utilizo como referencia para saber si lo he hecho mejor o peor.<br />
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Después, junto a <a href="http://mipequenacocinica.blogspot.com/" target="_blank">mi campeona</a>, homenaje por todo lo alto en <a href="http://www.google.es/search?q=el+quincho+murcia" target="_blank">El Quincho</a>, restaurante que no pisábamos desde su última reforma. Un sitio muy especial para mí -por diversas razones- que siempre nos deja con un gran sabor de boca y con la barriga llena.<br />
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La extenuante carrera y la opípara comida -sin olvidar <a href="http://www.reydelvino.com/vino/113_Flichman+Cabernet" target="_blank">la botella de vino</a> que hemos dejado <i>temblando</i>- han conformado el preludio perfecto para una siesta digna de competir en la Champions League de las siestas.Juan Ant.http://www.blogger.com/profile/03073460607928765831noreply@blogger.com4tag:blogger.com,1999:blog-1420446277421972518.post-20814621680419153662011-02-17T14:46:00.001+01:002011-02-17T14:49:28.111+01:00Por favor, no nos quiten la ficciónAlberto Cerúleo es un chico simpático. Sabe hacer reír a sus amigos, a sus padres, a su abuela, a sus compañeros de trabajo. Además, pertenece a ese selecto grupo de personas que siempre tienen la frase adecuada en el momento preciso. Capaz de resolver conflictos y, reconozcámoslo, con una habilidad innata para generarlos -y salir fortalecido de ellos-, Alberto es el ejemplo de líder. Enamoradizo como pocos, la vida le ha ido arrastrando de amor en amor, con el sufrimiento final como denominador común de todos ellos.<br />
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El miércoles pasado estaba sentado en su banco favorito del muelle, como cada día de la semana. Se dirige allí todas las noches con el único fin -aunque él no lo admita- de incrementar su frustración: la ve pasar, alegre y despreocupada, del brazo de su amado; sonríe, suspira, deja volar su imaginación durante veinte segundos -tal vez sean veinte minutos, el tiempo se detiene- y vuelve a casa, caminando con los hombros encogidos y las manos en los bolsillos jugando con dos monedas, mientras sus pensamientos planean en el cielo de sus deseos.<br />
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Algo debió ocurrir el miércoles pasado: ella no apareció. Era la primera vez que esto ocurría desde que Alberto acudía a aquel banco. Presa de los nervios, anduvo alrededor de su banco dando pasos confusos y desorientados, hasta que decidió recurrir a uno de los más socorridos trucos para retrasar -y multiplicar- la frustración: el alcohol. Se dirigió al bar más cercano, aquel al que nunca había entrado porque <em>era un bar de viejos, </em>y pidió un whisky con hielo. Tres lingotazos después y tras haber justificado su desazón con sumo detalle ante el resignado camarero, encendió un cigarro y respiró hondo.<br />
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Ahora, varios días después, Alberto Cerúleo debe pagar 30 euros de multa por fumar en un bar. Yo no pagaré esta multa porque no soy Alberto Cerúleo, soy <a href="http://juanantoniosa.blogspot.com/" target="_blank">Juan Antonio S.A</a>. Alberto Cerúleo no puede pagar la multa porque es un personaje de ficción y, como tal, no existe en la realidad. No tiene más derechos ni más deberes que los que su creador, yo en este caso, quiera otorgarle. ¿Quién pagará la multa? Nadie, espero.<br />
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Confío en que se imponga la cordura y el razonamiento del párrafo anterior se aplique al <a href="http://www.europapress.es/catalunya/noticia-advierten-obra-teatral-hair-fumar-escenario-20110213152433.html" target="_blank">incidente que ha originado el relato de Alberto Cerúleo</a>.<br />
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Si nos quitan la ficción, ¿qué nos queda?Juan Ant.http://www.blogger.com/profile/03073460607928765831noreply@blogger.com6tag:blogger.com,1999:blog-1420446277421972518.post-13632206848555207522011-02-16T20:26:00.000+01:002011-02-16T20:26:46.391+01:00Prensa manipuladora 2.0<a target="_blank" href="http://juanantoniosa.blogspot.com/2011/01/periodismo-del-siglo-xxi.html">Como ya sabéis</a>, por sugerencia de <a target="_blank" href="http://mipequenacocinica.blogspot.com/">mi Gema</a>, hemos empezado a reunir la colección de libros titulada "Las Claves de la Ciencia", de la que El Mundo vende un ejemplar cada domingo de forma conjunta e inseparable con el periódico. Cada semana, bajo a por el libro e intento renunciar al periódico, solicitud que el kioskero rehúsa tajante diciendo que "<i>el libro va con el periódico"</i>. Por si su respuesta no fuera suficiente, esgrime unas amenazadoras tijeras que me hacen retroceder dos pasos, temeroso de un mal mayor; alejada mi presencia, y en un arranque de ira incontrolable, recorta un trozo del periódico que él llama "<i>el cuponcito</i>". Al parecer, debe destrozarme el periódico para que no le revoquen la licencia de armas, o algo así.<br />
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De vuelta en casa, cuando hojeo el periódico siempre encuentro algún que otro artículo cuya lectura atenta u oteo fugaz me hace pensar: "¡<i>Qué disparate! Esto lo contaré luego en <a target="_blank" href="http://juanantoniosa.blogspot.com/">el blog</a>"</i>. Unas veces lo cuento y otras lo descarto, bien porque prefiero contar otras cosas o por pensar que el mencionado disparate únicamente toma tal cariz sólo desde una perversa subjetividad que prefiero evitar.<br />
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El domingo pasado, venía -en uno de los suplementos- una entrevista a Rufino Etxeberría, piedra angular de <a target="_blank" href="http://es.wikipedia.org/wiki/Sortu">Sortu</a>, la nueva formación política que representa los ideales de la izquierda <i>abertzale</i>.<br />
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El titular de esta entrevista es alarmante: "<i>Nos guiamos por lo que dice ETA"</i>. ¿Qué? Afloran las contradicciones <i>on my mind</i>: ¿cómo pudieron decir el otro día que rechazaban la violencia en general (includa la de ETA) y que no tenían nada que ver con ETA y ahora decir que se guían por ellos? ¿Mintió? ¿Miente ahora?<br />
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Leamos el artículo.<br />
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No sé si reírme o llorar. No sé si indignarme o pensar que es más de lo mismo, una manipulación más, y no darle importancia.<br />
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¿Sabéis qué quería decir realmente Rufino con esa frase? Que él no ha hablado con ETA directamente, pero que tiene la sensación de que esta vez la tregua va en serio. ¿Por qué? Porque ETA lo ha dicho, y ellos confían en esto. Se basan (= guían, en este contexto) en lo que dice ETA para concluir que renuncian a la violencia.<br />
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¿Es esto lo que insinuaba el titular? ¿Qué pretendía el periodista? ¿Qué porcentaje de la población lee sólo los titulares del periódico? Me temo que es alto. Jugando a adivinar, yo diría que por encima del 70%. Esto significa que la mayoría de la ciudadanía llegó al bar diciendo "¿<i>ves Ramón? ¡Lo que yo te decía!</i> <i>Es la ETA la que manda en el nuevo Batasuna ese</i>...". ¡Objetivo cumplido! ¡Brillante ejercicio periodístico!<br />
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Por un motivo u otro, descarté reflexionar aquí sobre este asunto. Tal vez pensé que la interpretación era producto de aquella subjetividad perversa. Hasta ayer.<br />
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Ayer, el gran <a target="_blank" href="http://www.escolar.net/MT/archives/2011/02/como-manipular-una-entrevista.html">Ignacio Escolar reflexionaba sobre este asunto</a>. Se lo dije a mi Gema y me dijo, entre risas, "<i>te ha pisado la idea, ahora si lo escribes pensarán que te has copiado"</i>. Le contesté que "<i>no, al contrario, me alegro: si uno de los referentes del periodismo actual se ha dado cuenta de esto, no iba yo tan desencaminado...". </i>Si alguien piensa que he copiado la idea, <i>me la suda</i>. Los que me conocen saben que no es así, y con eso me basta.<br />
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Para terminar, otra perlita. <a target="_blank" href="http://www.periodistadigital.com/periodismo/prensa/2011/02/15/ignacio-escolar-acusa-mundo-manipular-entrevista-rufi-etxeberria.shtml">Periodista Digital dice que es Escolar quien manipula</a>. Ahora resulta que Escolar "<i>vitupera todo lo que no se publique en Público, diario siervo de Zapatero...</i>" <br />
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Vivir para ver...Juan Ant.http://www.blogger.com/profile/03073460607928765831noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1420446277421972518.post-77222563474469532002011-02-14T14:58:00.000+01:002011-02-14T14:58:39.318+01:00Ganando 52 euros sin (apenas) moverme del sillónAVISO IMPORTANTE: nadie va a encontrar aquí un remedio milagroso que pueda poner en práctica en beneficio propio.<br />
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El viernes, tras dar por concluida la siempre extenuante semana de trabajo, llegué a casa y me encontré dos sorpresas: una cartita amenazadora de nuestra querida <a href="http://www.uned.es/">UNED</a> en la que me exigen el ingreso de 32 euros, en un PLAZO IMPRORROGABLE DE DIEZ DIAS (transcribo las mayúsculas, literalmente), si no deseo que den al traste con mi aventura de estudiante, reanudada una vez consolidada mi posición en el mercado laboral. El concepto del nuevo pago: pago complementario de matrícula. ¿Ein? ¿Una asignatura concreta de repente cuesta 32 euros más y las otras tres siguen valiendo lo mismo? Por otra parte, la segunda y no menos inesperada sorpresa se materializaba en forma de cargo en la cuenta: los del cable me cobran 20 euros, como quien va a la cárcel sin pasar por la casilla de salida y sin cobrar las veinte mil pesetas.<br />
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Pospuesta la resolución del primer particular para el lunes (por ser en exceso extraña la presencia de trabajadores en el ente universitario un viernes a las cuatro de la tarde), me dispongo a aclarar el segundo entuerto. Estimo imposible un derroche de 20 euros en llamadas, pues mis llamadas de pago se redujeron a felicitar el cumple a mi sobrina, y a algún que otro <em>telefonazo </em>a los 902 de turno. Las incluidas en tarifa plana, no cuentan.<br />
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Me dirigí al local de <em>los del cable</em>, y aclaramos el tema: se habían equivocado y en lugar de anotar 1,75 euros en llamadas, habían grabado 17,75. ¡Toma castaña! Pues nada, que me lo devuelven. Y ya de paso, aprovechando el sentimiento de culpabilidad del eficiente empleado, consigo que me adelanten la duplicación de la velocidad de Internet, prevista para las próximas semanas. Nunca mejor dicho: no hay mal que por bien no venga. Me abonarán los 20 euros (aproximadamente) y ya no se me cortan los <em>streaming.</em><br />
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Recibimos al lunes sin todavía extinguirse del todo los vapores etílicos y <em>morcillílicos </em>de la fiesta de cumpleaños de mi suegro. ¡60 tacos! ¡Ahí está el tío! ¡Y se sube las montañas con la bicicleta que parece Virenque!<br />
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Llamo a la UNED. Tras un previsible estira y afloja en el que me intentaban convencer de que YO era quien estaba haciendo el cálculo mal, consigo una respuesta esperanzadora: "<em>me tomo nota y que lo vea luego mi compañera; ella te llamará"</em>. Chachi. Al rato, me llama la compi. Me explica que se trata de un error. Inicialmente, en la matrícula realizada en septiembre, se calculó <strong>correctamente</strong> una reducción de un 20% en el precio de una asignatura, al no haber tutorías de ésta. Ahora, tres meses después, y tras realizar un minucioso recálculo en busca de morosos y anomalías en general, el programa no ha funcionado bien, decidiendo esta vez, porque sí, porque yo lo valgo, que no procedía el descuento del 20% y que les adeudo 32 euros. Lo que mi reducida sesera no consigue discernir es: ¿por qué en estos casos no generan una incidencia y las revisan todas antes de enviar amenazantes misivas? ¿Convertirse en alumno implica la aceptación de este tipo de decisiones unilaterales? Al menos, me ha pedido <strong>disculpas</strong>, y me ha dicho que rompa la carta. Conclusión: he ganado 32 euros. Bien está lo que bien acaba.Juan Ant.http://www.blogger.com/profile/03073460607928765831noreply@blogger.com4tag:blogger.com,1999:blog-1420446277421972518.post-83879681728692940032011-02-11T20:20:00.000+01:002011-02-11T20:20:13.971+01:00El desengaño del crecimientoDe bebé pasé a ser niño; de niño a adolescente; de adolescente a jovenzuelo; de jovenzuelo a joven; de joven a <i>todavía joven pero ya no tan joven</i>; y creo que por ahí vamos ahora. El denominador común de estas etapas siempre ha sido mi respeto y sagrada admiración por algún sector de la población y/o sujetos concretos; inicialmente confinado a mi entorno -capitaneado éste por padres y hermanos- y ampliando miras progresivamente para ir descubriendo personajes como <a target="_blank" href="http://www.youtube.com/watch?v=kf-IKN0fn2o">Rosa León</a>, <a target="_blank" href="http://www.youtube.com/watch?v=S9UVj0BE_1A">Torrebruno</a>, <a target="_blank" href="http://www.youtube.com/watch?v=aHcWo5i3x3Y">Espinete</a>, <a target="_blank" href="http://es.wikipedia.org/wiki/Isabel_Tenaille">Isabel Tenaille</a>, <a target="_blank" href="http://www.youtube.com/watch?v=_O9FCvT4MYs">Gloria Fuertes</a>, <a target="_blank" href="http://www.youtube.com/watch?v=9zkultaE4fY">José María García</a> y tantos otros a los que yo iba asimilando como adalides del campo que representaban.<br />
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Dicha admiración me ha llevado siempre a tener fe ciega en sus actos, palabras y decisiones. A no juzgarles ni cuestionarles. A defenderles a ultranza. Siempre creí que las personas situadas en la cima de un colectivo o institución son capaces de realizar su función mejor que nadie.<br />
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El inexorable paso del tiempo nos va poblando de arrugas, achaques y, sobre todo, de desengaños. Lo que en su momento creímos blanco ahora lo vemos negro, y viceversa.<br />
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De todas las personalidades admiradas en mi -corta o larga según con quién se compare- existencia, aquellos que siempre han merecido un respeto mayor, a mi juicio, son los políticos. Se me antoja una labor tan sumamente trascendental y complicada, en todos los aspectos, que les percibo como seres de otro mundo; su inteligencia trasciende la mía, de largo. Pero quiero que sea así: soy feliz viéndoles desde esa admiración. Supongo que me reconforta saberme conducido y protegido por superhéroes intelectuales.<br />
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Bienvenido, me digo a mí mismo, al mundo del desencanto.<br />
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En los últimos tiempos, asisto con enorme perplejidad a las declaraciones públicas que realizan unos y otros. A sus -cuestionablemente sinceras- opiniones emitidas en los medios de comunicación. Si dices algo ante un micrófono estás diciendo, a la vez, dos cosas: 1) esto es lo que pienso y 2) quiero que todos sepáis que esto es lo que pienso.<br />
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El objetivo de esta entrada/artículo/post no es hacer una relación de frases célebres. Pero no quiero terminar sin hacer una breve reflexión sobre <a target="_blank" href="http://www.publico.es/ciencias/360558/ana-botella-sobre-la-contaminacion-el-paro-asfixia-mas">la gota que ha colmado el vaso del chasco</a>: "<i>si la contaminación de Madrid asfixia, más lo hace el paro</i>". ¿Qué nos quiere decir la <b>actual</b> concejal de <b>medio ambiente</b> de Madrid, <a target="_blank" href="http://es.wikipedia.org/wiki/Ana_Botella">Ana Botella</a>? ¿Que si hay un problema grave debemos desatender el resto de cuestiones <b>importantes</b>? ¿Todas las concejalías de Madrid están trabajando intensamente para reducir el paro? ¿También la de Sanidad, por ejemplo?<br />
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¿Es permisible que los políticos se expresen con unos índices demagógicos que deberían estar restringidos al bar y a las tertulias <i>telebasúricas</i>?<br />
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Presenciar esta clase de episodios, si bien me descorazona por provocarme esa conocida sensación de "se me ha caído un mito" -obviamente, no en la figura de Ana Botella sino de los politicos en general-, no es menos cierto que me proporciona un paradójico efecto reconfortante, demostrándome que si intelectos así pueden alcanzar la cúspide de algo, ¿qué no podría hacer yo?Juan Ant.http://www.blogger.com/profile/03073460607928765831noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-1420446277421972518.post-85904497608971712522011-02-09T21:45:00.000+01:002011-02-09T21:45:02.547+01:00La refinanciación de Cataluña... y del restoPor si alguien todavía no se ha enterado, una de las últimas polémicas que revolucionan este convulso país es la oportunidad que el Gobierno ha concedido a Cataluña de refinanciar su deuda -concretamente, los préstamos que vencen en 2011-, iniciativa catalogada de denigrante agravio comparativo por diversos analistas y políticos afectados.<br />
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Es muy divertido disparar una y otra vez al muñeco, sobre todo si el feriante nos autoriza a tirar sin coste alguno.<br />
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Pero yo me pregunto, ¿qué ha pasado aquí realmente? ¿Es tan sencillo esto como que el Gobierno concedió un privilegio a Cataluña -<i>es que nos interesa para que voten a nuestro favor en la reforma de las pensiones y tal, ya sabes</i>- o hay algo más en todo esto? Analicemos tres posibles escenarios:<br />
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<b>Fallo de previsión</b>: El Gobierno decide autorizar a Cataluña a refinanciarse, y a nadie se le ha ocurrido que el resto va a querer lo mismo. No sé, son bobos, pero no creo que tanto, ¿no?<br />
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<b>Fallo en las formas</b>: El planteamiento del Gobierno es permitir lo mismo a todas las autonomías de forma igualitaria. Como el caso catalán es en este momento -discutiblemente- el más necesitado, lo gestionan sin tranquilizar al resto: "<i>aprobémoslo en primer lugar y a continuación abriremos la veda al resto</i>".<br />
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<b>Rectificación</b>: La idea era permitírselo sólo a Cataluña pero, habida cuenta del brote de cólera originado en la zona que ocupo (Murcia y Castilla La Mancha, principalmente), tendremos que dar marcha atrás y <i>a pajera abierta</i>. La diferencia entre este escenario y el primero es que en éste había una intención explícita de ser inecuánime, mientras que el primero es una cuestión de "<i>no habíamos caído</i>".<br />
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¿Por cuál de estos casos apostáis?<br />
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En cualquiera de los tres, las reacciones de los dirigentes autonómicos ha sido un pelín exagerada, en mi opinión (aunque por otra parte muy consecuente con estos tiempos de crispación continua que vivimos): ¿no parece más lógico hacer la solicitud y si no te la conoceden, entonces quejarte? ¿Por qué asumen todos que van a ser tratados injustamente? ¿Es una cuestión de "<i>vamos a quejarnos pronto, que al último que reclame no le llega</i>"?<br />
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Y, al margen de por qué ha actuado el Gobierno de esta forma: ¿nos parece bien que autoricen esta refinanciación? Estoy de acuerdo con que no es de recibo que los gobiernos autonómicos y los ayuntamientos gasten más de lo que ingresan pero, ¿es este caso equiparable al hijo que gastó su paga en chuches el primer día y, para que aprenda, no le conocedemos una paga extra? Yo creo que no, pues las consecuencias de prescindir de elevadas dosis de <i>Peta Zetas </i>y <i>Lolly-Pops</i> durante una semana no son tan negativas como las que provoca la morosidad de las instituciones locales.<br />
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Soy partidario de que "<i>quien la hace, que la pague</i>", pero hay que buscar formas de que la pague sin perjudicar a tantos millones de personas.Juan Ant.http://www.blogger.com/profile/03073460607928765831noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-1420446277421972518.post-68572249379391963142011-02-08T21:43:00.001+01:002011-02-08T21:45:21.637+01:00Batasuna y la división de poderesLa legalización del nuevo <a href="http://www.elperiodico.com/es/noticias/politica/20110208/sortu-defiende-legalidad-tras-rechazar-violencia-eta/697026.shtml" target="_blank">Batasuna</a> es un tema realmente complicado que, como casi todo en estos tiempos que corren, está generando opiniones para todos los gustos. Las personalidades del mundo del periodismo, la política y la farándula en general, han tomado las posiciones esperadas desde el principio, sin sorpresas: la izquierda desde su inherente tolerancia y relativa candidez; la derecha, blandiendo el dedillo acusador y la tolerancia cero.<br />
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No tengo claro qué opina mi sentido común en este asunto, aunque sí veo dos aspectos que parecen obvios: la legalización de un partido político no depende de si comulgamos con su planteamiento sino de que cumpla o no la Ley de Partidos. Por otra parte, cualquiera diría que los portavoces habituales de medios y (algunos) partidos no han entendido todavía la división de poderes de nuestro Estado en Ejecutivo, Legislativo y Judicial. Las cuestiones que competen al Poder Judicial, deben ser resueltas por los jueces, y la legalización de un partido político es una de ellas.<br />
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Esta aparentemente débil frontera entre los tres poderes es también una de las claves de la Ley Sinde, aunque yo no la mencionara <a href="http://juanantoniosa.blogspot.com/2011/01/la-ley-sinde-o-como-dar-palos-de-ciego.html" target="_blank">en mi reflexión de hace unos días</a>: no conviene trasladar ciertas cuestiones del Judicial al Ejecutivo. Los asuntos en los que se ve involucrada la propiedad intelectual, son muy complicados y con gran cantidad de matices: deben ser resueltos por jueces, no por una comisión dependiente del Ejecutivo (Ministerio de Cultura, en este caso).<br />
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Volviendo al tema de Batasuna, insisto: no sé qué pensar. Por un lado, en su declaración de intenciones afirman condenar la violencia, matizando expresamente que "<i>también la violencia de ETA</i>". Según La Razón, condenan la violencia <i><a href="http://www.larazon.es/noticia/5931-batasuna-al-dictado-de-eta" target="_blank">tibiamente</a></i> y es ETA quien está realmente detrás de todo esto. Viniendo de donde viene, huele a manipulación. Pero claro, si tenemos en cuenta que <a href="http://es.wikipedia.org/wiki/Rufi_Etxeberria" target="_blank">Rufino Etxebarria</a> -uno de los artífices de este nuevo proyecto- siempre ha sido uno de los tipos importantes en todas las formaciones políticas anteriores que nunca han condenado a ETA, pues no sé. ¿Debemos perdonarle? ¿Qué pensáis?Juan Ant.http://www.blogger.com/profile/03073460607928765831noreply@blogger.com4